Pese a que los mayores desvíos se registraron en el primero año de Adán Augusto, la ASF sigue sin presentar denuncias hasta la fecha
Por Arturo Angel
La administración de Adán Augusto López como gobernador de Tabasco dejó un balance negativo en temas de seguridad y manejo de recursos públicos. Por un lado, los homicidios alcanzaron niveles récord; por el otro hubo decenas de posibles actos de corrupción que dejaron casi dos mil millones de pesos desaparecidos.
El morenista fue elegido para el periodo de enero de 2019 a octubre de 2024. Los primeros tres años encabezó de forma directa la administración, mientras que al segunda parte la hizo quien un interino, Carlos Merino Campos, luego de que el propio Adán lo designara secretario de Gobierno.

En el apartado de combate a la violencia homicida el balance es negativo. La administración sexenal cerró con un cifra de 3 mil 319 personas asesinadas de acuerdo con los registros del secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Una cifra récord en el estado para cualquier periodo de gobierno.
El 2019, primer año del sexenio, la entidad cerró con 697 víctimas de homicidio que hasta ese momento era la cifra más alta registrada. En los años posteriores la cifra de asesinatos registró una disminución sostenida alcanzando su punto más bajo en 2023 con 271 víctimas de homicidios.
Pero en el último año del sexenio la situación se descompuso de forma acelerada, y 2024 concluyó con 921 víctimas de homicidio, más del triple del año anterior.
Cabe señalar que en diciembre de 2019 Adán Augusto López designó en el cargo de secretario de Seguridad a Hernán Bermúdez Requena, quien se mantuvo ahí hasta que concluyó la administración sexenal en octubre de 2024. Ahora Bermúdez Requena es prófugo de la justicia, tras girarse una orden de aprehensión en su contra por presuntos nexos con el narcotráfico y crimen organizado.

El caso refleja ciertos paralelismos con el del exfiscal General de Justicia de Nayarit, Edgar Veytia, para el periodo 2011 – 2016. En esa etapa se registró un descenso relevante durante varios años en los homicidios y otros delitos de alto impacto.
Sin embargo, a la postre se reveló que el funcionario tenía diversos arreglos con criminales y que lo que había era acuerdo deliberado con una facción del Cartel de Sinaloa para dejarlos operar a cambio de mantener contenidos los actos violentos.

Corrupción sin castigo
De acuerdo con datos oficiales de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), la administración de Adán Augusto López y de su interino Carlos Merino dejaron más de 1 mil 952 millones de pesos provenientes de recursos federales desaparecidos en la entidad.
Se trata de una de las administraciones pertenecientes o aliadas de la llamada 4T que ha dejado una mayor cantidad de recursos con observaciones de los auditores, solo superada por lo registrado en Veracruz y en Puebla.
Los malos manejos registrados en el sexenio de Adán Augusto están vinculados con 78 irregularidades graves detectadas por los auditores que dieron pie a posibles quebrantos a la tesorería federal, y que afectaron a fondos federales destinados para temas de obras, seguridad, salud, entre otros.
Cabe señalar que, de los montos observados, casi 1 mil 500 millones, es decir más del 70 por ciento de las anomalías, se concentran en 2019, que es el primer año de Adán Augusto. Pese a que ya han transcurrido más de cinco años de esas anomalías y los recursos no se han repuesto, hasta la fecha la ASF no ha presentado las denuncias penales correspondientes.