En respuesta a la persistente sequía que afecta a la región fronteriza entre México y Estados Unidos, ambos gobiernos acordaron invertir hasta 400 millones de dólares en infraestructura prioritaria para la conservación y diversificación de fuentes de suministro de agua.
La decisión se dio en el marco de la primera reunión semestral del Banco de Desarrollo de América del Norte (NADBank), celebrada este año.
El anuncio fue realizado por el Consejo Directivo del NADBank, que detalló que la inversión se canalizará a través del Fondo de Resiliencia Hídrica (FRH), un instrumento financiero que permitirá financiar proyectos con operaciones crediticias blandas y préstamos a tasas de interés bajas.
Durante los próximos cinco años, el banco destinará hasta 100 millones de dólares de sus utilidades retenidas para estos fines, y usará hasta 300 millones de dólares adicionales de su programa de crédito regular.
El FRH representa la medida más reciente impulsada por el NADBank para enfrentar la escasez de agua en la región. El objetivo es promover el acceso equitativo al agua potable y saneamiento, así como mejorar la resiliencia de las comunidades fronterizas ante el cambio climático y la presión sobre los recursos hídricos.
“Este enfoque está diseñado para fortalecer el ecosistema general de inversión y acelerar la ejecución de proyectos de infraestructura hídrica considerados de alta prioridad”, señaló John Beckham, director general del NADBank.
Además, subrayó que los recursos se distribuirán en partes iguales entre México y Estados Unidos, y que en una primera etapa se dará prioridad a proyectos dirigidos a mitigar los efectos de la sequía en el sector agrícola.
Como parte del proceso de aprobación, el NADBank abrirá un periodo de consulta pública de 30 días para recibir comentarios sobre el funcionamiento del FRH, antes de que el Consejo Directivo determine su aprobación definitiva.
Durante la misma jornada, el Consejo presidió una reunión pública en formato híbrido, que contó con la participación de cerca de 100 asistentes de ambos países, incluyendo representantes comunitarios, autoridades, desarrolladores de proyectos y organizaciones de la sociedad civil. En el encuentro, los participantes compartieron observaciones y propuestas enfocadas en el desarrollo de proyectos ambientales.
El Consejo Directivo del NADBank está compuesto por 10 integrantes: funcionarios de alto nivel de ambos países, incluidos los titulares de Hacienda, Medio Ambiente y Relaciones Exteriores de México, así como representantes del Tesoro, la Agencia de Protección Ambiental y el Departamento de Estado de Estados Unidos. También participan delegados de los estados fronterizos y de la sociedad civil.
Con esta iniciativa conjunta, ambos gobiernos reafirman su compromiso por atender la crisis hídrica en la frontera y garantizar un desarrollo sostenible para las comunidades afectadas.