Steve Bannon, exasesor del presidente Donald Trump y uno de los críticos más acérrimos de Elon Musk, aconsejó al magnate republicano que cancelara todos los contratos del multimillonario tecnológico y lo investigara.
En entrevista con el periódico New York Times, Bannon señaló:
“Deberían iniciar una investigación formal de su estatus migratorio, porque soy de la firme creencia de que es un extranjero ilegal, y debería ser deportado del país inmediatamente”.
Asimismo, Bannon dijo al diario neoyorquino que el gobierno de Trump también debería investigar el consumo de drogas de Musk, y su esfuerzo por obtener información clasificada sobre China del Pentágono. Ambos temas reportados por NYT.
“La autorización de seguridad de Musk debería suspenderse durante estas investigaciones”.
Musk y Trump se enfrentan fuertemente en redes sociales
Trump amenazó este jueves con cortar los contratos del Gobierno de Estados Unidos con empresas propiedad del multimillonario Elon Musk, mientras la alianza entre el presidente de Estados Unidos y el hombre más rico estallaba en una rencorosa pelea pública.

Trump arremetió contra el CEO de Tesla, diciendo que estaba “decepcionado” por la oposición pública del multimillonario a la amplia ley de recorte de impuestos y gastos que está en el corazón de la agenda del republicano.
A esto, Musk respondió sugiriendo que Trump debería afrontar un juicio político.
El mandatario escribió en su sitio de redes sociales Truth Social: “La forma más fácil de ahorrar dinero en nuestro Presupuesto, miles de millones y miles de millones de dólares, es poner fin a los subsidios y contratos gubernamentales de Elon”.
Tras los exabruptos, las acciones del fabricante de vehículos eléctricos Tesla TSLA.O, cayeron un 14,3% en el día y perdieron alrededor de 150.000 millones de dólares en su valor de mercado después de que ambos comenzaron sus disputas.
Minutos después de la campaña de cierre, Musk respondió: «Sí», a un post en X que preguntaba si Trump debería afrontar un juicio político. Los republicanos tienen mayoría en ambas cámaras del Congreso y es muy poco probable que se abra un proceso de este tipo.
Las tensiones crecieron rápidamente el jueves, luego de que Trump aireara lo que calificó de decepción con quien hasta hace pocos días era su mano derecha.
“A ver, Elon y yo teníamos una gran relación. No sé si la seguiremos teniendo”, había dicho antes Trump en el Despacho Oval. “Dijo las cosas más bonitas sobre mí, y no ha hablado mal de mí personalmente, pero estoy seguro de que eso será lo próximo. Pero estoy muy decepcionado con Elon. He ayudado mucho a Elon”.
Trump también afirmó que los ataques de Musk contra el proyecto de ley estaban motivados por la propuesta de eliminar los créditos fiscales a los consumidores de vehículos eléctricos. El empresario, que se expresaba en su red social X mientras el mandatario hablaba, ha dicho que se opone al proyecto de ley porque aumentará el déficit federal.

El gobernante sugirió que Musk, que recibió una despedida llena de elogios la semana pasada después de supervisar su campaña de reducción de costos de la burocracia federal, estaba molesto porque echaba de menos trabajar para él.
“No es el primero”, dijo Trump. “La gente deja mi Gobierno… luego en algún momento lo extrañan tanto, y algunos de ellos lo aceptan y algunos de ellos realmente se vuelven hostiles”.
Trump podría tener dificultades para llevar a cabo sus amenazas contra el negocio espacial de Musk, que desempeña un papel fundamental en el programa del Gobierno estadounidense.
Musk dijo que, como resultado de las amenazas de Trump, planeaba comenzar a desmantelar la nave espacial Dragon de SpaceX. Dragon es la única nave espacial estadounidense capaz de enviar astronautas a la Estación Espacial Internacional.
Los cohetes reutilizables y baratos Falcon 9 de SpaceX la han convertido en el proveedor de lanzamientos más activo del mundo. Su vasta red Starlink ha cambiado totalmente el mercado mundial de las comunicaciones por satélite.
Musk: ‘Sin mi ayuda Trump habría perdido la elección’
Posteriormente, Musk publicó en X que sin su ayuda “Trump habría perdido la elección”.
En otra publicación dijo que estaba bien con los recortes a los créditos de vehículos eléctricos, siempre y cuando los republicanos eliminaran lo que él llamó una “montaña de grasa repugnante” en el gasto superfluo del proyecto de ley.
Musk llegó al gobierno con planes audaces de recortar 2 billones de dólares del presupuesto federal, pero se marchó la semana pasada habiendo logrado mucho menos que eso, o alrededor de la mitad del 1% del gasto total.
El magnate ha sido un poderoso aliado de Trump, que gastó casi 300 millones de dólares para impulsar a los republicanos en las elecciones de 2024 y luego supervisando el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de Trump.
Su trabajo eliminando miles de empleos federales y recortando miles de millones de dólares en ayuda exterior y otros programas causó trastornos en todas las agencias federales y provocó protestas generalizadas en los puntos de venta de Tesla en Estados Unidos y Europa.
Musk estuvo presente con frecuencia en la Casa Blanca e hizo múltiples apariciones en el Capitolio, a veces llevando a su hijo pequeño.

Una enemistad prolongada entre Trump y Musk podría dificultarle a los republicanos mantener el control del Congreso en las elecciones de mitad de mandato del próximo año. Además de sus gastos de campaña, Musk tiene un enorme número de seguidores en Internet y ayudó a conectar a Trump con partes de Silicon Valley y donantes ricos.
Musk ya había dicho que planeaba reducir su gasto político en el futuro.
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Poco después de los comentarios de Trump, Musk hizo una encuesta a sus 220 millones de seguidores en X: “¿Es hora de crear un nuevo partido político en Estados Unidos que realmente represente al 80% del centro?”.
Con información de Reuters