Por Alejandra Larrañaga
¿Alguna vez has pensado en cómo cubrir los costos de la universidad de tus hijos? Aunque la idea de que estudien en una universidad privada suena atractiva, la realidad es que esos gastos no se cubren solos. ¿Estamos preparados para enfrentar ese desafío financiero? Para responder a estas preguntas, contamos con Adrián Diarte, experto en finanzas y seguros, quien nos habló sobre los seguros educativos como una opción para garantizar el futuro académico de los más jóvenes.
Los costos de las universidades son elevados, pero, como mencionó Adrián Diarte, es una inversión que vale la pena. En Sonora, contamos con universidades de gran prestigio y reconocimiento nacional, donde es esencial invertir en la educación de nuestros hijos. “Los seguros educativos son herramientas accesibles para cualquier bolsillo, que permiten cumplir el sueño de los padres de que sus hijos asistan a una buena universidad”, explicó.
Adrián señaló que los costos de las universidades varían, pero un semestre en una universidad privada de prestigio puede costar alrededor de 140 mil pesos. Si consideramos la inflación universitaria, este costo podría alcanzar los 300 mil pesos por semestre dentro de 10 a 15 años, lo que haría que una carrera completa superará los 3 millones de pesos. Sin embargo, como indicó, “el tiempo es un gran aliado en las inversiones”, lo que permite a los padres planificar este gasto sin afectar su situación financiera actual.
Una de las preocupaciones comunes sobre los seguros educativos es qué ocurre si los padres no pueden continuar pagando. Adrián nos tranquilizó, explicando que los seguros educativos incluyen un componente de seguro de vida, lo que garantiza que el monto proyectado esté disponible, incluso si no se ha completado el pago del seguro. “Nadie tiene comprada la vida, pero si podemos asegurarnos de que los sueños que tenemos como padres se cumplan”, destacó.
Aunque lo ideal es empezar a planificar desde el nacimiento del niño, Adrián Diarte aseguró que no es tarde para comenzar si el niño tiene entre 6 y 7 años. “El tiempo es el componente más importante en una inversión, y quien determina todo”, explicó. Si bien es mejor comenzar desde que nacen, cualquier momento es adecuado para empezar a cubrir los costos futuros de la educación.
Finalmente, Adrián Diarte reafirmó que los seguros educativos no son solo una estrategia para vender productos, sino una opción comprobada para garantizar el futuro académico de los hijos. “Muchos mexicanos han logrado concluir una educación superior en universidades de renombre, tanto dentro como fuera del país, gracias a que tomaron la decisión de invertir en estos seguros educativos”, destacó.