El Senado de la República de México aprobó por unanimidad una reforma histórica que fortalece los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos.
Con 127 votos a favor, se modificó el artículo 2º constitucional para garantizar el reconocimiento y protección de sus derechos colectivos, su autodeterminación y la preservación de su patrimonio cultural, material e intelectual.
Esta reforma asegura que los pueblos originarios y afromexicanos sean reconocidos como sujetos de derecho público, con personalidad jurídica y patrimonio propio. Además, se establece su derecho a la consulta libre, previa e informada en cualquier decisión que pueda afectar sus recursos y territorios.
La reforma se aprobó durante la segunda sesión de la cámara donde varios senadores destacaron la importancia de esta reforma. Antonino Morales Toledo, senador indígena oaxaqueño, afirmó que este cambio representa un voto a favor de recuperar la dignidad y la esperanza de los pueblos históricamente relegados.
Por su parte, la senadora purépecha Celeste Ascencio Ortega expresó su gratitud al presidente Andrés Manuel López Obrador por su compromiso con la justicia y la visibilización de estos grupos vulnerables.
Senadores de Morena y de la oposición coincidieron en la importancia de realizar dicha modificación legal con el fin de destacar el compromiso de México con sus pueblos originarios.
Información de La Jornada