Por Francisco Sandoval
Hermosillo, Sonora.- Cinco de los seis establecimientos clausurados por la Dirección General de Bebidas Alcohólicas en Hermosillo y Coordinación Estatal de Protección Civil, ya se encuentran abiertos al público.
Dichas medidas se habían tomado porque los comercios incumplían las normas establecidas en el reglamento, ya que no contaban con aspectos básicos para estar en operación, como seguridad, comprobación de mayoría de edad o deficiencias en documentos legales, entre otros.
El único establecimiento que sigue cerrado es Taco & Beer, mientras que La Chila Cantina, Cervecería La 22, Panic Botanic, El Estribor y La Barra Morelos realizaron las inversiones y trámites correspondientes para cumplir con las normas establecidas por la ley.
Si bien, los lugares mencionados ya se pueden visitar, los gerentes de los comercios aseguran que el caso de Jakarta, donde murieron tres personas, y las clausuras han provocado una baja afluencia de clientes en los antros y bares.
Antonio Romero, gerente general de La Chila Cantina, dijo que el pasado 9 de febrero, 11 elementos de la policía llegaron al lugar para inspeccionar la zona “se bajan armados, así asustan a la gente”.
“A los clientes les da miedo otra balacera, la vez que llegaron a cerrar (la clausura) me rodearon el bar de estatales, de ministeriales. Estamos de acuerdo que estén verificando y coordinando, pero esos no son los modos”, agregó.
Aseguró que La Chila Cantina ya está al corriente en el cumplimiento de las normas “se nos levantó las sanciones y por nuestra parte nos ponemos a la disposición de las autoridades”.
Por otro lado, Juan Carlos Lugo, gerente de Cervecería La 22, detalló que “después de lo que sucedió en Jakarta, el temor sigue”. Continuó que el espacio que administra es para que la gente vaya a divertirse “un momento de distracción y de alejarse de sus problemas”.
Precisó que el pasado sábado 3 de febrero las autoridades de alcholes y de protección civil clausuraron el bar, y fue hasta el pasado viernes 9 de febrero que pudieron reanudar las operaciones.
Explicó que en las notas que publicaron los medios de comunicación, apareció que algunos bares, entre ellos La 22, algunas personas no acreditaron la mayoría de edad “es muy diferente a menores de edad”, ya que sus clientes no pudieron comprobar con una identificación que ya tenían los años suficientes para consumir alcohol.