Dos activistas medioambientales mancharon este miércoles con pintura roja un cuadro del pintor francés Claude Monet en el Museo Nacional de Estocolmo para protestar por la situación ambiental causada por la pérdida de humedales en Suecia.
El movimiento climático Restaurar Humedales, Aterstall Vatmarker en sueco, informó en su perfil de Twitter que dos de sus activistas, tras manchar con pintura roja el cuadro, se pegaron al cristal que protegía la pintura en cuestión, llamada El jardín del artista en Giverny.
“Quieren llamar la atención sobre el hecho de que la crisis climática también es una crisis sanitaria, y que las enfermedades relacionadas con el calor se están convirtiendo en un problema cada vez mayor”, explicó la portavoz del movimiento, Roxy Farhat, según recogió la cadena de televisión pública sueca SVT.
Farhat indicó además que el cuadro está “intacto” y que las dos activistas medioambientales, una enfermera y una estudiante de enfermería, fueron detenidas por la Policía sueca, informó el diario sueco ‘Dagens Nyheter’.
La fábrica de MPO France había sido encargada por Universal Music para llevar a cabo el prensado del disco. Con este robo y la potencial filtración del contenido del disco, el gigante de la música podría terminar sus contratos con la compañía.
Por su parte, un portavoz del Museo Nacional, Per Hedstrom, sostuvo que “el patrimonio cultural tiene un gran valor simbólico y es inaceptable atacarlo o destruirlo, independientemente del propósito”. El cuadro de Monet está siendo examinado por los conservadores para ver si ha sufrido daños.
Estas acciones se suman a las protestas que se han llevado a cabo en diversos museos, donde activistas también han lanzado distintos objetos a obras de arte, incluidas de Monet, Van Gogh, Goya e incluso un esqueleto de dinosaurio.
En un llamado a tomar acción por el cambio climático, los colectivos y activistas por el medio ambiente han optado por protestar a través del arte, pero de una forma disruptiva.