La casa en la sindicatura Jesús María en Culiacán, Sinaloa, donde capturaron a Ovidio “El Ratón” Guzmán López, el pasado 5 de enero, tenía rastros de sangre, granadas activas y cientos de casquillos percutidos, pero guardaba una pista sobre el camino del líder de Los Chapitos. Un escorpión.
Guzmán López usaba su imagen como sello distintivo de los cargamentos de droga que él y sus hermanos traficaban a través de la frontera con Estados Unidos.
El periodista Óscar Balderas detalla que desde 2017, la Administración de Control de Drogas (DEA) buscaba pistas que vincularan al Ratón con los cargamentos de fentanilo marcados con un escorpión.
En ese año, la DEA decomisó un cargamento de droga con el sello del arácnido y el cual pertenecía a personas del Cártel de Sinaloa. Desde entonces sabían que ese animal se había convertido en emblema de uno de los grupos criminales más poderosos de México.
Droga ‘marca’ El Chapo
En México y en el mundo, los envoltorios de droga sellados con una insignia en particular, se han vuelto cada vez más comunes.
Los emblemas representan la ‘marca’ y el sello del grupo criminal que los envía. En México se ha seguido el rastro de los cárteles a partir de estas insignias; sin embargo, poco a poco los criminales han aprendido a distraer a sus seguidores con ingenio y variedad.
Durante años, el Cártel de Sinaloa ha usado como sello la cara del terrorista Osama Bin Laden (1957-2011), así como iniciales o figuras de animales como en el caso de El Ratón Guzmán.
Información de El Financiero