Por Stephanie Reyes
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseveró que Ucrania es responsable del “crimen despreciable” de Daria Dugina, hija del ideólogo y asesor ultranacionalista Alexander Dugin.
Pese a que el gobierno invadido rechazó un nexo con el carro bomba, el líder del Kremlin sostuvo que esa nación es la culpable del homicidio del pasado 20 de agosto luego de que estallara el vehículo en el que viajaba la joven periodista.
Y recordó a la víctima e hija del politólogo promotor del euroasianismo como “una persona brillante y talentosa dotada de un corazón verdaderamente ruso”.
En tanto, el padre de la víctima calificó los hechos como un acto “a traición de los enemigos de Rusia”.
Dicha acusación fue sustentada por el Servicio de Seguridad ruso (FSB, por sus siglas en ruso) que señaló que los servicios secretos de Ucrania planearon y perpetraron el asesinato, presuntamente con apoyo de una ciudadana ucraniana, identificada como Natalia Vovok, quien presuntamente tras el crimen salió de Rusia a Estonia con su hija, para evitar posibles sanciones o represalias en su contra.
Incluso, señalaron que cuentan con evidencia de que personal de contrainteligencia alquiló un departamento para Vovk en el mismo edificio en el que vivía Dugina para vigilarla, pues al investigar a la mujer se detectó que llegó a Rusia en julio pasado.
Con dicha acusación parecieran desmentir las versiones de que el explosivo pudo estar dirigido a Dugin, señalado como el “cerebro de Putin”.
Información de La Razón