Hermosillo, Sonora.- Es importante identificar señales de alarma en relaciones de pareja y si es así, buscar ayuda, no solo cuando haya problemas, sino para crecer en unión. No hay manual para las parejas, a veces no nos damos cuenta de las alarmas, pero, si es posible, es necesario resolverlo para no caer en divorcio, puntualizó Mayra Leyva.
La psicoterapeuta, quien se especializa en terapia de pareja, compartió para Proyecto Puente los seis tipos de relaciones problemáticas, o ‘tóxicas’, con el objetivo de que las personas que formen parte de uniones sentimentales puedan reconocer indicios de violencia y pedir apoyo profesional.
Tipos de relaciones ‘tóxicas’
Relación de dependencia: en esta relación, las dos personas se apoyan una a la otra, pueden sentirse bien, pero es limitante, ya que cuando una de las personas quiere crecer, comúnmente perturba a la otra.
Relación sofocante: se utiliza un vocabulario muy específico, por ejemplo, “no puedo vivir sin ti”. Esta relación se sentirá agradable durante un periodo, sin embargo, a la larga, los integrantes de la relación se llegan a sentirse atrapados.
Relación de pedestal: el amante ama por quien cree que es su pareja, es decir, ama la imagen idealizada que elaboró. Los problemas de comunicación son frecuentes, ya que una de las partes mira hacia arriba al otro y no como una persona real. Construyen una pareja sin cercanía o intimidad.
Relación amo-esclavo: el amo actúa y se le trata de acuerdo con sus ideas: “soy el jefe”, “yo tomo las decisiones”. Ocurre no solo en hombres, sino también en mujeres. Mantener a una persona como amo y otra como esclavo quita energía emocional, lo que resultará en una lucha por el poder, junto a una comunicación deficiente y actitud intimidante.
Relación ‘casa de huéspedes’: las personas automatizan su vida, es decir, viven diariamente sin prestar atención en el otro. No hay expresión, reciprocidad de amor ni comunicación.
Relación de mártir: alguien que se sacrifica por completo sirviendo a los demás. Cosas para los otros y nada para uno mismo. El mártir es bueno para controlar a la gente y es difícil vivir con él. Además, se siente culpable por expresar sus sentimientos.
Relación amorosa: es aquella que es sana, humana, íntegra, donde las partes se sienten dichosas y deciden estar juntos para compartir su vida. Esta relación da crecimiento e identidad, gracias al respeto y la comunicación.
A continuación, te dejamos la entrevista completa por nuestro canal de YouTube: