-Anuncio-
viernes, abril 19, 2024

Esperanza y agradecimiento prevalecen pese a horas de espera en el primer día de vacunación en Hermosillo

Últimas Noticias

Acude Natanael Cano a audiencia del Juzgado Cívico en Hermosillo

Hermosillo, Sonora.- El cantante hermosillense, Natanael Cano, fue visto la mañana de este 19 de abril, en la comandancia...

Detienen en México a pareja que cruzaba a migrantes hacia EEUU

Una pareja mexicana que cobraba 5 mil pesos (unos 292 dólares) a migrantes por cruzarlos a Estados Unidos fue detenida en...

Se comprometen Célida López y Froylán Gámez a detener los altos cobros en servicios bancarios y crédito

Se comprometen los candidatos del Partido del Trabajo (PT) al Senado de la República, Célida López y Froylán Gámez...
-Anuncio-

Por Ana Gamboa, Priscila Cárdenas, Mary Montijo, Astrid Arellano, Luis Ángel Carlín y Germán Carbajal

El 6 de abril fue un día especial para las personas mayores de 75 años en Hermosillo en los diferentes puntos de la ciudad, pues comenzó la jornada de vacunación, hecho que fue recibido con gusto, aunque con dificultades y retrasos según un recorrido realizado por Proyecto Puente.

Country Club, CBTIS 11, norte de la ciudad, Las Amapolas, Café Combate y…El Mariachi

Luego de un año de estar cerradas, las escuelas abrieron sus puertas cerca de las seis de la mañana para dar paso a médicos, enfermeras y personal de Cruz Roja, quienes prepararon todo para recibir a quienes tenían sus citas para vacunarse.

En el Cobach Norte, localizado en la calle Luis Encinas y Veracruz, la jornada comenzó -con unas 15 personas en la fila- puntual a las ocho de la mañana. El señor Ausdiberto Aguilar, de 76 años de edad, vecino de la colonia Pitic fue uno de los primeros en vacunarse.

Tras recibir su inyección Ausdiberto dijo estar feliz de que “por fin llegara algo a Sonora” que sirviera para combatir el virus que tantos fallecimientos ha causado en el mundo.

Este módulo de vacunación localizado en la colonia Country Club brindó atención a residentes de las colonias 5 de Mayo, Periodista, Pitic, Los Igualados, y de otros sectores localizados al bulevar Eusebio Kino.

Sin sillas y sin sombra en Bugambilias

Conforme avanzaron las horas también se incrementó la temperatura en Hermosillo y con ello la inconformidad de la gente, pues no se imaginaron que pese a haber agendado cita tuviesen que esperar hasta hora.Tal fue el caso del módulo que se instaló en el CBTIS 11, ubicado en la colonia
Bugambilias
, a donde acudieron vecinos de la Jesús García, Sacramento, Misión del Sol y de otras colonias aledañas al bulevar Morelos.

Pese a que también en este punto de vacunación la jornada inicio puntal a las ocho de la mañana, el número de asistentes superó al área designada para la espera, por lo que las personas tuvieron que aguardar su turno de pie y bajo el sol.

Me parece inhumano como tienen a los señores en el sol, debieron haber pensando el calor que tenemos aquí las altas temperaturas, poner una pequeña carpa para las personas”, agrego la señora Bertha Alicia, quien acompañó a su papá a vacunarse.

Tanto en la banqueta de la calle Alfredo Eguiarte, como recargados en la pared de una plaza comercial ubicada junto a la escuela, más de cincuenta adultos mayores esperaron su dosis de AstraZeneca poco después de las once de la mañana.

Para el medio día otros módulos de vacunación presentaban un situación similar, como por ejemplo en la colonia El Mariachi, donde debido al gran número de personas en espera hubo quienes improvisaron venta de botellas de agua helada, “bolis” y otras bebidas para mitigar las altas temperaturas.

“Tenía la cita a las doce, ya tengo una hora esperando”, explicó la señora Jesusa Ibarra, de 75 años de edad, quien dijo sentirse afortunada por haber encontrado una “sombrita” debajo de un árbol que se asomaba de la preparatoria Cecytes de las calles Ures y Luis Encinas sitio donde se instaló el módulo de vacunación.

La jornada de vacunación transcurrió sin contratiempos en la colonia Las Amapolas, donde que termómetro marcara más de 30 grados no fue problema, pues la gente no hizo fila y quienes esperaban su turno lo hicieron sentados en sillas y en la sombra.

“En cuanto entré me sentaron a esperar unos quince minutos y después tuvimos que esperar media hora en observación y ya”, explicó Vicente Quijada, de 76 años de edad.

El módulo que se instaló en el interior de la primaria Lázaro Cárdenas del Río localizada entre las calles Fresno y Revolución, lució con pocas personas y bien organizado pese a que por fuera sólo colocaron un letrero que decía “credencial INE en la mano”.

El hecho de que las vacunas llegaran tarde fue la causa del retraso en el módulo que se habilitó en la colonia Café Combate, donde aunque las personas esperaron una hora mantuvieron el apoyo mutuo y la buena actitud.

De acuerdo con el señor Rodolfo Navarro Jiménez, de 75 años de edad, fue gracias a que su hijo acudió a hacer fila por él como pudo contrarrestar las consecuencias del calor y del cansancio.

“¿Qué le diré?, claro que me tengo que poner la vacuna, de algo me va a servir, de mucho, pero lo que se necesita es organización, eso es”, explicó el hombre sentado en la silla de plástico que trajo de su casa.

López Portillo, Jesús García, Reforma, Balderrama y Cecytes

En la puerta de la entrada, Ernesto Dávalos recibía a los adultos mayores con alegría, entusiasmo y empatía; preguntaba sus edades, pedía una identificación, les hacía pasar y hasta ofrecía su silla para sentarse cuando no había otras disponibles.

La Escuela Primaria Pascual Pérez González, en la colonia López Portillo, se convirtió en uno de los módulos de vacunación para Hermosillo; en el primer día, se aplicaron alrededor de 800 vacunas a personas mayores de 75 años. (Serán 3 mil 200 por los cuatro días).

Aunque la organización y la agilidad de los voluntarios y Servidores de la Nación dieron pie a que el proceso se realizará sin ningún imprevisto, hubo una pieza clave que transformó en alegría la mañana de quienes acudieron a este punto para vacunarse.

Ernesto Dávalos tiene 59 años. Es uno de los voluntarios que ayudaba a las personas a ingresar, pero sobre todo, y gracias a su carisma y entusiasmo, les dio la confianza que necesitaban para perder esos nervios y vacunarse sin ningún problema.

Me siento contento por estar ayudando en estas labores que son trascendentales en el país, porque todos los mexicanos deberíamos ayudar en este momento tan difícil para México. Lo hago con mucho gusto”, dijo.

Lo mismo sucedió en otros puntos de vacunación, como el Colegio de Bachilleres del Estado de Sonora plantel Reforma, y la Escuela Primaria 6 de Abril, en las colonias Balderrama y Jesús García, donde la amabilidad de los voluntarios y las caras alegres marcaron la diferencia, y los adultos mayores lo notaron.

Por un lado, en el COBACH Reforma las dosis se entregaron antes de las 8:00 horas, permitiendo que la aplicación de las dosis iniciara puntual; por otro lado, en el Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Sonora (CECyTES) plantel Alto Valle, la situación fue muy diferente: las 510 vacunas llegaron dos horas y media después de lo previsto.

A pesar de esto, y del desespero que pudo haber ocasionado por quienes esperaban bajo el sol ya que no había carpa o sombra que los protegiera, buscaron la manera de organizarse para hacer que el proceso se agilizara y lo lograron.

Muy diferente fue la situación en la Escuela Primaria Vicente Mora, en la colonia Balderrama: aglomeración de adultos mayores y familiares que los acompañaban, gritos por doquier, desacuerdos en el método de organización y hasta discusiones

El ciudadano Mario Trujillo comentó a Proyecto Puente que los voluntarios en ese módulo otorgaron turnos a personas cuyos apellidos no correspondían con el horario de la mañana y que esto ocasionó un total descontrol que, hasta las 10:00 de la mañana, no había sido aminorado.

La aplicación de las dosis continuará este miércoles 7 de abril en los mismos puntos repartidos en la ciudad, así como en el área de San Pedro y en el Poblado Miguel Aleman; se espera que, durante los cuatro días, se vacunen más de 67 mil adultos mayores.

CUM, CBTIS 206 Melchor Ocampo, Hábitat Solidaridad IV, Hábitat Internacional

Eran las 6:20 de la mañana cuando se abrió la puerta central sur del Centro de Usos Múltiples, que se ubica por el bulevar Solidaridad; a partir de esa hora comenzaron a ingresar adultos mayores de 75 años con la esperanza y emoción de recibir la vacuna contra el covid-19.

El biológico arribó a las 7:30 al Gimnasio de la Pelota, mientras que afuera, en una sombra, se encontraban más de 100 personas esperando su turno. Media hora después, Alejandrina, Rafael, María y más señores, comenzaron su recorrido por el triage, para después ser vacunados y, por último, permanecer unos cuantos minutos en el área de observación.

“Después de un año de estar esperando una esperanza, ya que llegó, ¿cómo la vamos a desperdiciar? Bendito sea Dios. Estoy muy contenta, muy agradecida con el Gobierno, con las personas que han contribuido”, narró María Armendarez.

Para el recinto deportivo se destinarán cinco mil dosis, con una meta de mil 200 diarias.

Los asistentes a la escuela Melchor Ocampo, en la colonia Eusebio Kino, no tuvieron la misma suerte, pues las vacunas llegaron a las 11:00 de la mañana, por lo que había personas que tenían cuatro horas esperando, situación que desesperó y molestó tanto a los interesados en recibirlas, como a los acompañantes.

“Está mal coordinado, nada más, porque llegas, entras, luego viene otra gente a checarte la presión y si no pues te enfermas por tanta espera. Gracias a Dios ya llegó la vacuna, pero muchos vinimos sin desayunar”, externó el señor Mario Benitez.

Se tienen programados más de cuatro mil biológicos para el punto que se albergó en la primaria. Por otra parte, en el Centro Hábitat Solidaridad IV se planteó una meta de 650 aplicaciones diarias.

En este último se presentó una situación similar, ya que la campaña arrancó a las 9:30 y generó que se hicieran largas filas en las dos salas de espera. Inclusive, para medio día, los interesados comenzaron a aguardar afuera del parque.

Cerca del bulevar Quiroga, en el Hábitat de la colonia Internacional, el ambiente fue muy diferente pues ni siquiera había filas de espera, los abuelitos llegaban directo al chequeo médico que los llevaba a la mesa de vacunación y al final aguardaban tranquilos en observación.

“Yo veía las noticias que todos en unas largas filas y sufre mucho la gente. Yo vengo, entro, camino y luego, luego. Llegué hace como unos 10 minutos y ya”, narró doña Rosa Palma.

Para este lugar se destinarán 490 vacunas diarias y, hasta el momento, no ha tenido mayor complicación; al igual que en el CBTIS 206, en donde todo marchó en orden desde las 8:00 de la mañana.

Universidad, Palmar del Sol, Minitas y CBTIS 132

Don Roberto Guevara se levantó a las cinco de la mañana y pidió ayuda a un amigo suyo para llegar a la Universidad de Sonora. Con su silla de ruedas, fue empujado desde el pequeño departamento donde vive solo en el centro de Hermosillo, hasta el módulo de vacunación contra el covid-19 instalado para que los adultos mayores con problemas de movilidad acudieran en sus vehículos, sin necesidad de bajarse.

Él se enteró por un periódico local de que la vacunación empezaba este martes y, a las 7:00 de la mañana, ya estaba listo y en espera de que se abriera la puerta. Guevara tiene 84 años y fue el primer vacunado en ese lugar, donde se aplicaron 840 dosis en la primera parte de la jornada.

“Dije: voy a ir, a ver qué y me trajeron”, dijo el originario de Tamaulipas, pero avecindado en Hermosillo desde hace más de 40 años, “estuve un tiempo considerable encerrado, a veces salía a comprar algo y me regresaba, así estuve… y en el tiempo ese [de confinamiento] me sentía bien, me siento bien hasta la fecha”.

Detrás de él, entraron Georgina Grijalva y Bárbara Terán, de 78 y 79 años, amigas con una historia de más de seis décadas. Ambas son maestras jubiladas y han estado juntas en las buenas y en las malas: de tener un grupo con 70 amigos profesores, se les redujo a 20 con el paso de los años, pero, con la llegada del covid, perdieron a cuatro amigos más. Por eso, este fue un día histórico para su amistad: estar juntas y sanas, es un regalo inmenso.

“Muy contenta porque vengo con mi compañera, mi amiga de toda la vida, en primer lugar”, dijo Bárbara, “y pues siempre con un poco de miedo, pero con mucho valor para enfrentarlo, le da nervios a uno que vaya a contagiarse del mentado covid”.

Y Georgina agregó: “No puede uno decir: voy por la vacuna y me va a sustituir todos los hábitos de salud que yo tengo, pues no, pero sí se recomienda que se las pongan, la verdad, me he ahorrado muchos problemas respiratorios gracias a las vacunas, por prevención”.

Aunque el arranque de la jornada de vacunación en la Universidad de Sonora estaba previsto para las 8:00 horas, los primeros automóviles con adultos mayores llegaron desde las 5:15 de la mañana. La aplicación comenzó a las 08:50, con la recepción de una primera carga de la vacuna AztraZeneca, custodiada por la Guardia Nacional y distribuida en seis células de vacunación.

Cada una, estuvo integrada por tres enfermeras y enfermeros que recibían a los adultos mayores arriba de sus vehículos, sin necesidad de bajarse, para luego enviarlos a la zona de observación a una espera de 30 minutos donde reciben acompañamiento en caso de la aparición de algún efecto secundario.

A pesar de que hubo gente que esperó una hora bajo el sol, pero dentro de sus carros, se sintieron satisfechos con la logística en la universidad y manifestaron irse contentos, agradecidos y sin complicaciones. 

La jornada fue distinta para las y los adultos mayores que acudieron al centro de vacunación de la Escuela Secundaria José Vasconcelos, en la colonia Palmar del Sol, pues manifestaron inconformidad por el desorden del módulo que provocó una larga espera en las banquetas e incluso bajo el sol.

Personas que esperaban desde antes de las 8:00 de la mañana, afirmaron que la desorganización produjo que se empalmaran horarios de los asistentes, por lo que la espera se prolongó por horas, hubo aglomeración en la puerta de acceso principal y la fila rodeó casi por completo la escuela.

Zoyla Guerrero llegó con su esposo Jesús Hurtado, ambos de 82 años. Su turno era a las 11 de la mañana y llegaron con algunos minutos de anticipación, pero la fila ya era demasiada para formarse y tampoco nadie les indicó qué hacer en ese momento.

“Está muy lento esto, a nosotros nos toca a las once, pero tampoco podemos hacer cola porque yo no me siento bien de la espalda”, dijo Guerrero.

Liborio Chávez Peñúñuri, verificador sanitario de la Secretaría de Salud, acudió a este centro de vacunación para registrar la situación y afirmó que, al tratarse de un suceso completamente nuevo para Hermosillo y el personal de salud, se salió de control, pero se busca detectar y resolver todos los problemas para perfeccionar la atención en lo inmediato.

“No sé, lo que creo es eso: la novatez de las circunstancias, posiblemente sea eso”, dijo Chávez, “pero esta aglomeración, se supone,que debe ser corregida ya en futuras ocasiones, me refiero a mañana, pasado y el resto de la jornada, para que no vuelva a pasar este detalle”.

Ya en los centros de vacunación del Centro Hábitat Las Minitas y en el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (Cbtis) 132 la situación fue mucho más agradable para los adultos mayores, pues hubo mayor coordinación y agilidad al momento de atenderles.

En el exterior del Cbtis 132, Argelia Ibarra, de 75 años, busca apurada entre las cosas de su bolsa de mano. Quiere comprobar ante la cámara, orgullosa, que ya se vacunó: por fin encuentra el formato de registro con sus datos, lo desdobla y sonríe.

Me siento muy contenta, muy feliz y vamos a esperar a la segunda dosis”, y agregó, como mensaje a otros adultos mayores que dudan vacunarse, que “hay que tenerle más temor a la enfermedad, ¿qué es un piquete o que te dé un mareo? Yo creo que es mejor la vacuna”.

A la señora Victoria Domínguez, de 70 años, se le salieron las lágrimas de agradecimiento cuando, al acompañar a su esposo Joaquín Noris, de 77, una enfermera le dijo que ella también podía vacunarse aunque su turno fuera al día siguiente, para que no tuviera que volver a hacer el esfuerzo.

Era el momento que esperaba desde que inició la pandemia y lo vivió en la misma preparatoria donde estudiaron sus hijos, el Cbtis 132, de Hermosillo.

“Lloro de la emoción porque le tocaba a mi esposo nada más y le dije a la señorita y tuvieron conciencia y nos dijeron que sí y gracias a Dios”, dijo Victoria con los ojos humedecidos, “Yo soy de Veracruz y, en una semana, se fueron cuatro familiares [por covid], un día uno, otro día otro… cuatro. Y pues eso nos hizo reflexionar que sí hacía falta la vacuna, pero aquí estamos, gracias a Dios”.

Luego concluyó: “En esta escuela estudiaron mis hijos, ahorita entramos y se sintió la emoción de cuando veníamos a las juntas, histórico, porque es un grano de vida, algo que nos queda para recordar, decir: vinimos a esta escuela, pero ahora a recuperar salud”.

Estadio Sonora

A las 06:30 horas de este martes, ya había al menos cinco adultos mayores en espera para aplicar la vacuna contra el covid en las instalaciones del Estadio Sonora. 

Patricia Álvarez, a cargo de la dirección de atención ciudadana del municipio de Hermosillo, explicó que la vacuna se aplicaría entre los asistentes hasta la 18:00 horas.

En este punto, la logística para la aplicación de la vacuna está liderada por personal del IMSS, y fue aproximadamente a las 08:30 horas que se suministró la primera dosis de las dos mil que llegaron al lugar, se espera que durante el día lleguen las, en la medidas que se vallan aplicando. Fue la señora Lilia Fimbres la primera en recibir la vacuna en el Estadio Sonora.

A la señora Fimbres, la llevó su propia hija, dijo no estar nerviosa y que la aplicación de la vacuna la ve con buenos ojos.

Cabe agregar que la gobernadora Claudia Pavlovich también supervisó el proceso.

Además, en la Secundaria Técnica #15, la vacuna contra el covid llegó a las 11 de la mañana.

CAFV Los Encinos, Hábitat Los Olivos, Centro AMAH Altares

Adultos mayores como don Rubén Durazo Torres, vecino de la colonia Piedra Bola, recordó los pleitos con su esposa durante la cuarentena, pero también la emoción de ser el segundo en vacunarse contra el coronavirus en el módulo del Centro de Apoyo en la Formación de Valores (CAFV), ubicado al sur, en el fraccionamiento Los Encinos.

Abajo del letrero de vacunación, el hombre de 81 años descansa sentado en una silla mientras espera su turno. Trae consigo bastón en mano, su cubrebocas bien puesto y un poco de emoción, pues al vacunarse sabe que estará protegido en gran medida de contraer Covid-19. 

“Pues sí hay un poco de emoción porque después de un año de estar esperando a que llegue esto, pues vamos a ver los resultados para estar más seguro y más tranquilo. (¿Tiene sentimientos encontrados?) Fíjate que sí, sobre todo acá con la doña (esposa), estar un año juntos los dos, pleitos de todo tipo, enojos, pero son muy naturales en el ser humano. Estar encerrado un año, pero cuidándonos. Estamos tranquilos por ahora”, expresó don Rubén Durazo Torres.

Esta emoción que sintió don Rubén, así como mujeres y hombres mayores que se formaron para vacunarse, poco a poco fue terminándose, pues las aproximadamente 300 vacunas disponibles para el CAFV no llegaron a tiempo y la desesperación comenzó a apoderarse de ellos.

Los turnos de las 8:00, 9:00 y 10:00 horas se juntaron en uno solo, por lo que los adultos mayores de 75 años, acompañados de sus familiares, hicieron una enorme fila que rodeó parte del Centro de Apoyo en la Formación de Valores (CAFV).

En ella hubo personas paradas de la tercera edad, otras sentadas en sillas que fueron colocadas en la banqueta del lugar, esperando  se agilizara el proceso de vacunación, pues las temperaturas aumentaban y ni las sombrillas alcanzaron para aminorar el calor que empezaba a sentirse.

Después de una hora con 15 minutos finalmente llegaron las vacunas para los adultos mayores y con ello la tranquilidad de saber que estarán protegidos contra el virus.

Al aire libre pero resguardados del Sol y las altas temperaturas, hasta las 15:00 horas aproximadamente, decenas de adultos mayores se vacunaron contra el coronavirus, en el Centro Hábitat de la colonia Los Olivos.

El sitio, al igual que los 32 módulos, fue dividido por las áreas de valoración médica; vacunación y observación; precisamente en esta última estaba en su silla de ruedas María Morales Noriega, de 75 años, quien padece diabetes, enfermedad que la dejó sin una pierna.

Ella es originaria del municipio de San Pedro de la Cueva pero reside en la colonia Arcoiris, en Hermosillo. Pese a que se mantuvo indecisa en la aplicación de la vacuna, optó por ponérsela.

“Me siento bien, gracias a Dios. Ya me hubiera sentido mal (en caso de un posible efecto secundario de la vacuna). Padezco diabetes desde hace más de 15 años. Hace cinco años me quitaron la pierna porque me di un golpe en el talón”, detalló María Morales Noriega.

El módulo de la Escuela primaria Vicente Guerrero, ubicado en la colonia El Ranchito, no abrió, pues al recorrer por fuera del plantel se observó cero actividad de vacunación contra el coronavirus.

Resguardados de las altas temperaturas y el calor, decenas de adultos mayores recibieron su vacuna contra el coronavirus en el Centro AMAH de la colonia Altares, donde tuvieron un amable y servicial trato por parte del personal de salud. 

Azelia Larios Guzmán, de 84 años, vecina de la colonia Adolfo de la Huerta, fue una de las personas vacunadas y aconsejada por su médico particular sobre la correcta aplicación de la vacuna.

“La atención está muy bien, en cuanto llegué creía que esto iba a ser más tardado y no, llegué y ya me pasaron. Me enseñaron la jeringa para que viera que sí tenía líquido. Ayer mi médico me dijo “fíjese que sí tenga aunque sea agua”. Sí tenía agua, la muchacha me la mostró y me la pusieron. Estoy muy contenta”, abundó Azelia Larios Guzmán.

Más de 250 adultos mayores fueron vacunados contra el coronavirus en el Cobach Villa de Seris, uno de los 32 módulos más concurridos de Hermosillo.

Lidia Ruelas López, de 75 años, vecina de la colonia Cuauhtémoc, comentó que con la vacuna se siente más segura de no contraer coronavirus.

“Es algo que no nos había tocado ver ni sentir. Yo me siento bien gracias a Dios y el hecho de que ya me hayan vacunado, se siente uno más segura, aparte nos hemos andado cuidando pero ya con la vacuna es un refuerzo, se puede decir. Me siento tranquila”, expresó Lidia Ruelas López.

En general el arranque de la jornada de vacunación en Hermosillo, inició -en la mayoría de los 32 módulos- desde las 8:00 hasta las 20:00 horas. En algunos las vacunas llegaron entre una a tres horas tarde.

Los adultos mayores recibieron con alegría, tranquilidad y esperanza la vacuna contra el coronavirus, que causa la enfermedad SARS-CoV-2 y que desde hace poco más de un año mantiene al mundo bajo alerta de pandemia.

Sigue toda la información en el noticiero de Proyecto Puente con el periodista Luis Alberto Medina a través de nuestro canal de YouTube, dando click aquí.

-Anuncio-
-Anuncio-

Últimas Noticias

Suspende Coppel cobro de intereses por adeudo ante fallas en su sistema

Ciudad de México.- Durante la semana los clientes de Coppel han tenido problemas para hacer compras y pagos a...

Hallan sin vida a candidato de Morena a una alcaldía de Oaxaca

El candidato de Morena a la alcaldía de San José Independencia en Oaxaca, Alberto Antonio García, fue encontrado muerto tras ser...

Científicos descubren origen híbrido de las mariposas amazónicas

Un estudio por investigadores de la Universidad de Harvard
-Anuncio-