Carlos Ávila Montaño vivió la impotencia de no poder respirar ni saber si moriría cuando se contagió de coronavirus. Ahora que su salud mejora, cuenta su testimonio para reconocer el trabajo de los médicos que le salvaron la vida.
El hermosillense de 49 años estuvo internado 15 días de manera intermitente en la clínica 14 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), desde el 27 de diciembre hasta el 10 de enero; ingresó una semana y después fue dado de alta, pero debido a que su cuadro empeoró volvió a hospitalizarse.
Cuando iba y venía de la clínica, Carlos reflexionaba sobre la importancia de tener empatía con el prójimo, sobre todo en esta época de pandemia por covid-19, en la que gran parte de la población a nivel global es irresponsable y continúa saliendo a reuniones innecesarias, en ocasiones sin cubrebocas ni sana distancia.
En todo este caos mental por el que pasaba, llamó su atención la entrega del personal de salud que le brindó una atención humana y de calidad, ya que se encargaron de hacer hasta lo imposible para que superara la enfermedad.
“Eso te hace crear mucha conciencia aunque ya sea el último paso, son dos opciones, no solo es irte (morir), también te puedes quedar (vivir) y empezar a darle la oportunidad a tu mente de lo que hiciste y lo que no hiciste.
Entonces a mí en lo personal me pasaba mucho que en todo el trayecto que estuve y hasta donde llegué, miré a muchas personas víctimas de este mismo virus ya no regresar”, contó Carlos Ávila Montaño.
Con este testimonio, Carlos explicó que pretende crear conciencia entre la población al ser sobreviviente de covid-19, una enfermedad que llegó para quedarse y que la comunidad debe enfrentar de la manera más responsable posible.