Columna Pasión por los Negocios
Debo decir que estoy totalmente a favor de la causa feminista, de la lucha por la igualdad y en contra de males como el acoso, la inequidad laboral, la violencia de género y por supuesto los feminicidios, lo he manifestado por todas las vías e incluso cuando ha sido necesario he alzado mi voz en las instancias que sea necesario, incluso ante el presidente de la República.
Mi empeño y mi sueño es que logremos ser una sociedad más igualitaria, que las mujeres no sean vistas como objetos, que ya no se les pague menos en su trabajo por desarrollar las mismas funciones que sus pares hombres.
Deseo además que las damas dejen de ser acosadas sexualmente en su trabajo, por supuesto mi anhelo es que dejen de estar en peligro permanente de ser víctimas de violencia, sea sexual o física y claro que quiero que se acabe esta pesadilla de los feminicidios.
Es necesario que como sociedad hagamos un análisis de lo que estamos haciendo mal, tanto hombres como mujeres, porque visiones como la del machismo y el patriarcado, pero también el matriarcado y esta visión extremista de los grupos de anarco feministas-individualistas que han tomado expresiones de rechazo a la otra mitad del mundo, es decir los hombres, calificándonos de violadores a todos, es algo que hiere, aunque sea una forma de lucha que pueda ser considerada como legítima y necesaria ante la gravedad del momento por el que pasa el país.
Mi visión es que en cuestión de género no puede funcionar una mitad sin la otra y que como sociedad tenemos la responsabilidad de avanzar juntos, cualquier exclusión es negativa, la de las mujeres ha probado ser nefasta y hasta homicida, la de los hombres pudiera ser igual de trágica.
Me preocupa el machismo que parece estar inscrito en el ADN de los mexicanos, me indigna el machismo de los hombres, pero creo que hace el mismo daño el que ejercen muchas mujeres en contra de sus congéneres. Por eso es necesario propiciar un cambio cultural y de visión en el conjunto de los mexicanos y ese ejercicio solo lo puede hacer el gobierno como conductor de un cambio de paradigma en los roles de género.
Ahora sobre el 8 y el 9 de marzo, ayer subí a redes sociales el siguiente comunicado de mi visión y opinión al respecto, ha recibido apoyo y respaldo de mujeres feministas, de académicos e intelectuales, no pretendo marcar agenda, ni decirle a nadie cómo actuar u opinar, es simplemente mi visión:
Comunicado y novedad para los neo feministas el Día Internacional de la mujer es el 8 de marzo y no el 9, para el 9 de marzo está convocado un paro de que seguramente será muy exitoso, eso no tiene porque detener otras actividades donde ellas no están involucradas, yo apoyo a las mujeres en su lucha y es por eso que creo que estar informado sobre el tema es lo más importante.
El 8 de marzo se conmemora en todo el mundo y no es día de fiesta, es de lucha por la igualdad y contra la violencia se instituyó en todo el mundo desde 1975 como tal en memoria de 146 obreras textiles que murieron tras una protesta en Nueva York, justo el 8 de marzo de 1857.
Yo les deseo mucho éxito con el paro, más al ser hombre no estoy convidado. Cada quien es libre de desarrollar sus actividades y cumplir sus responsabilidades como quiera, soy empático con las damas en su movimiento, pero creo que es necesario no confundir el caldo con las albóndigas… Quien quiera comprar boletos de la rifa del avión, que no es rifa del avión, ese u otro día, sea hombre o mujer, no se opone a las mujeres ni al paro de el día 9. Es cuanto.