El Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (CESVI) revela que la mayoría de los conductores reconoce no haber visto al otro automóvil al momento de un choque. Los “puntos ciegos” se generan por la forma de la carrocería y aumentan debido a la incorrecta colocación de los espejos, lo cual puede ser un factor detonante de los accidentes automovilísticos.
Desde la posición del chofer solo se cuenta con visión hacia adelante, los laterales del vehículo y la parte trasera, de manera limitada, con la ayuda del retrovisor. El lado derecho, al ser el más alejado, es el punto más vulnerable puesto que no contamos con acceso visual directo a este. Por ello, es importante realizar rebases en esa dirección con precaución.
Uno de los errores más comunes se da al cambiar de carril. De acuerdo con CESVI, el 27% de las personas acepta no observar los espejos laterales antes de cualquier movimiento. Las consecuencias de estos accidentes pueden ser fatales, desde alcanzar a otro auto, hasta atropellar a un motociclista o peatón, por lo tanto, no es un tema que se deba tomar a la ligera.
Para evitar ser víctima o causante de un siniestro, te recomiendo:
· Ajustar el asiento del conductor, ya que de esto dependerá la posición de los retrovisores.
· Asegúrate de que los espejos siempre estén limpios, sin grietas u otros elementos que interrumpan tu visión. Acomódalos antes de encender tu vehículo.
· Al conducir, vigila constantemente, tanto los laterales como el retrovisor, especialmente antes de hacer cualquier movimiento al volante.
· Evita manejar por el punto de ciego de otros vehículos, especialmente los grandes, como los camiones.
· Si el ajuste del retrovisor te cuesta trabajo, puedes intentar colocar sensores de aparcamiento que te avisen cuando algún obstáculo esté cerca de ti al ir en reversa.
· Usa siempre las luces direccionales para avisar a otros conductores que realizarás alguna acción.
¿Cómo ubicar correctamente los espejos?
La colocación de ellos es fundamental para reducir el riesgo de accidentes, existen distintos tipos: planos, circulares y convexos, estos últimos están diseñados especialmente para reducir los puntos ciegos y se deben utilizar frecuentemente, sobre todo cuando se pretende realizar cualquier maniobra.
Lateral izquierdo: debe reflejar el borde derecho hasta la parte posterior de la carrocería del vehículo. El área restante del espejo debe reflejar a los autos y el carril de ese lado.
Lateral derecho: debe visualizarse una pequeña porción de la parte trasera del auto y una gran fracción del carril, es decir donde puedas observar una parte de la manija de la puerta trasera derecha y un carro entero del carril de a lado.
Retrovisor: evalúa a qué altura tienes una visión amplia de la parte trasera del coche, al conseguirla, ajústalo de tal manera que observes el medallón completo del parabrisas posterior.
El correcto uso de los espejos y realizar maniobras con precaución puede contribuir a disminuir los riesgos del punto ciego. La educación vial es imprescindible en nuestro país. Si bien trabajamos día a día para promoverla, una gran cantidad de personas desconoce u omite las normas de tránsito, lo que conlleva a cometer múltiples imprudencias que ponen en riesgo su coche y, más importante aún, la vida de las personas.
Información tomada de www.excelsior.com.mx