Hermosillo, Sonora.- Estudiantes del séptimo semestre del Programa de Cultura Física y Deporte de la Universidad de Sonora realizaron una jornada de reforestación para dejar una huella verde en su alma mater y devolverle vida a las zonas más afectadas por el calor en Hermosillo.
El trabajo forma parte de la materia Actividad Física y Cuidado del Medio Ambiente, impartida por María Elena Chávez, y su objetivo es compartir con las futuras generaciones un entorno más fresco, verde y saludable, fortaleciendo la conciencia ambiental y el sentido de pertenencia dentro de la comunidad universitaria.

Dicha actividad se llevó a cabo este miércoles 22 de octubre por la mañana, primero en el edificio 7H, desde el cual se impartió una charla sobre la importancia de la reforestación y el cuidado del entorno natural; más tarde, el grupo se trasladó a la alberca universitaria, espacio donde comenzó la plantación de los primeros árboles.
La jornada se concentró en una de las zonas conocidas como islas de calor dentro del campus universitario, específicamente en el área de la milla y la alberca, donde la falta de vegetación ha incrementado las temperaturas y afectado la calidad del aire, detalló la docente.

Explicó que la meta es revertir este fenómeno mediante la plantación de árboles nativos que ayuden a disminuir la contaminación y proporcionen sombra, oxígeno y bienestar.
“Los árboles son los que nos ayudan a disminuir esa contaminación, a darle mayor calidad al aire, pero también temperatura, hacer que esos hábitat o nichos ecológicos vuelvan a renacer, que se sientan protegidos”.
Antes de comenzar con la siembra, personal de la Dirección de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Hermosillo ofreció una plática sobre las técnicas adecuadas para realizar una plantación responsable, explicando cómo elegir las especies correctas, la distancia entre los árboles, el uso de tutores y el riego por goteo.

Posteriormente, la teoría se llevó a la práctica con la participación de alumnos, jardineros de la institución y personal del Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad de Sonora (STEUS).
En total, se programó la siembra de más de 120 árboles, entre ellos guamúchil y otras especies endémicas adaptadas al clima local. La elección de cada planta se hizo tomando en cuenta las condiciones de las áreas deportivas, la exposición al sol y la resistencia al entorno.
Se consideró que las especies tuvieran hojas amplias y frondosas para proporcionar sombra, evitando aquellas que pudieran afectar las instalaciones deportivas o causar obstrucciones en las tuberías.
“Al tener hojas grandes se puede sacar fácilmente de la alberca, que es un problema que tenemos con la hoja pequeña. La otra es considerar también que las hojitas pequeñas se van hasta el fondo y la otra es que tapa las tuberías. Entonces, en el área de deportes es muy importante considerar lo que se va a plantar”, mencionó.

La actividad fue coordinada por la Dirección de Vialidades y Jardinería de la Unison, a cargo del ingeniero Valentín Fabián, con el apoyo técnico de Luis Ignacio González, de Parques y Jardines.
Al finalizar la jornada, la profesora Chávez Valenzuela agradeció de los involucrados, así como de Ernesto Urbina, de Hermosillo ¿Cómo Vamos?, y del colectivo Caminantes del Desierto, que donó 40 árboles adicionales.
Los jóvenes se comprometieron a dar seguimiento al crecimiento de los árboles durante el resto del semestre, con el propósito de fomentar una cultura de cuidado ambiental y replicar estas acciones en sus comunidades.