La presidenta Claudia Sheinbaum acusó a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) de no asistir a una reunión previamente acordada para el 8 de mayo.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum explicó que la cita fue propuesta por ella misma tras una solicitud de los maestros para dialogar luego del primer paro de tres días.
“Ayer no lo mencioné, pero en la última reunión con la CNTE les propuse vernos el 8 de mayo. Ellos ya no se presentaron a esa cita”, declaró. “La idea era llegar a acuerdos mediante el diálogo directo con la presidenta, pero decidieron no acudir”, añadió, al tiempo que señaló que no hubo explicación por parte de los docentes sobre su ausencia.
La mandataria destacó que este encuentro tenía particular relevancia por haberse planeado antes del paro nacional del 15 de mayo.
El conflicto entre la CNTE y el Gobierno federal se ha intensificado en los últimos días, con bloqueos en distintos puntos del país y la Ciudad de México, y la advertencia de mantener las movilizaciones hasta el domingo 1 de junio, fecha de la primera elección del Poder Judicial en México.
Tras más de diez días de huelga y plantón en el Zócalo capitalino, los docentes han reforzado sus protestas, bloqueando accesos a instituciones como el Instituto Nacional Electoral (INE), la Secretaría de Educación Pública (SEP) y varias sedes de medios de comunicación.
Su principal demanda es un encuentro directo con Sheinbaum para exigirle el cumplimiento de su promesa de campaña: derogar la reforma educativa de 2007, que consideran lesiona sus derechos laborales.
El pasado lunes 20 de mayo, Sheinbaum reiteró su negativa a negociar con la CNTE, acusando al movimiento magisterial de buscar “boicotear” la elección judicial del próximo domingo.
“Ahora plantean lo mismo que la derecha: que hay que boicotear la elección. ¿Qué tiene que ver la voluntad del pueblo de elegir al Poder Judicial con la demanda de derogar la ley de 2007?”, cuestionó la presidenta.
También afirmó que esta postura se asemeja a la de “los sectores más conservadores” que llaman a no participar en los comicios del 1 de junio.