MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS).- La histórica incautación de mil 800 kilos de metanfetamina por parte de la Policía Nacional impidió que el Cártel de Sinaloa usara España como punto de distribución de esta peligrosa droga para llevarlo a otros mercados de países de Europa, gracias a una operación que conectó la intervención a principios de 2023 de 24 kilos de cocaína oculta en dos lavadoras en Tenerife con el 2principal punto de abastecimiento” del cristal meth.
La operación de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía se saldó con cinco detenidos, entre ellos el líder del entramado desarticulado, un ciudadano de origen mexicano residente en un chalé en una zona aislada de Villena, al noroeste de la provincia de Alicante, donde se ocultaba “el principal punto de abastecimiento de drogas de síntesis en territorio europeo”, explicó la Policía Nacional en un comunicado.
DROGA SIN CONSUMO MASIVO EN ESPAÑA
Los mil 800 kilos de metanfetamina incautados -con un valor de “varias decenas de millones de euros”- representan la mayor intervención en España y la segunda en Europa, lo que el comisario jefe de la UDYCO, Antonio Martínez Duarte, unió al intento del Cártel de Sinaloa de buscar nuevas rutas debido a la “presión” policial que se ejerce en otros países europeos para impedir la distribución de esta “droga bastante peligrosa que, afortunadamente, no tiene un consumo masivo en España”.
Los especialistas en la lucha contra el narcotráfico sitúan a este cártel mexicano como el dominador en la distribución mundial de la metanfetamina, una droga de síntesis que se consume principalmente en países del centro y norte de Europa, incluyendo Reino Unido y también Australia como uno de los principales destinos.
Además del cabecilla, mexicano enviado a España por el Cártel de Sinaloa y residente en el chalé de Villena, se detuvo a cuatro ciudadanos españoles que ya estaban fichados por la Policía al ser considerados “narcotransportistas” que usaban furgonetas caleteadas para ocultar la droga, junto a una mujer rumana que era pareja de uno de ellos.
En la rueda de prensa en el Complejo de Canillas, los investigadores policiales recordaron que la investigación continúa abierta, por lo que evitaron dar más detalles sobre esta red de distribución de metanfetamina. De hecho, han asegurado que “no tienen constancia” aun de si la droga entró en España por el puerto de Valencia o por otro lugar.