Hermosillo, Sonora.- El acceso al agua y a una alimentación adecuada son derechos fundamentales para la sobrevivencia de las personas; sin embargo, fueron violentados por los gobiernos neoliberales, afirmó la candidata al Senado de la República por Morena, Lorenia Valles Sampedro.
En el marco de la visita a la ciudad de Hermosillo de Alfonso Ramírez Cuellar, coordinador nacional de actores sociales de la campaña presidencial de la candidata Claudia Sheinbaum.
Luego de llevarse a cabo el Encuentro Regional “El norte mexicano. Agua y producción de alimentos: retos y soluciones 2024-2030”, el cual convocó a representantes de Baja California, Chihuahua, Durango, Sinaloa, Tamaulipas, Zacatecas y Sonora, mismo que contó con la participación del gobernador Alfonso Durazo, la candidata morenista afirmó que la Cuarta Transformación ha dejado claro que el agua y la alimentación son derechos de las personas que el Estado está obligado a garantizar.
“En cuanto al derecho a la alimentación, no podemos pasar por alto que, en México, el maíz es el alimento más importante; cada persona consume en promedio 328 gramos diarios solamente en tortillas, lo que le provee de 39% de las proteínas, 45% de las calorías y 49% del calcio diario requerido. Por lo tanto, la defensa del maíz blanco es una lucha en favor de la alimentación de las familias mexicanas”, dijo la morenista.
Aseguró que un paso fundamental de la Cuarta Transformación fue que, en 2020, se publicó la Ley Federal para el Fomento y Protección del Maíz Nativo, la cual reconoce la producción, comercialización, consumo y tradicional diversificación del maíz, como manifestación cultural y garantía del derecho a la alimentación.
“En la agenda de nuestro proyecto de nación está la reforma constitucional para proteger el maíz de los transgénicos, que promueve el presidente de la República, así como la soberanía alimentaria propuesta por Claudia Sheinbaum”, comentó.
Con respecto al agua, mencionó que México padece un estrés hídrico preocupante, situación que es más grave en los estados del norte, como Sonora.
“Un primer paso es reformarla para declarar a México un país libre de maíz genéticamente modificado, como el transgénico, para siembra y consumo humano, así como reconocer al maíz como alimento básico y elemento de identidad nacional”, externó la aspirante al senado.
“Igualmente, vamos por la prohibición constitucional de concesiones en zonas con baja disponibilidad de agua, priorizando el consumo personal y uso doméstico; además, de impedir prácticas que dañan el medio ambiente, el agua y la salud, como la minería a cielo abierto y el fracking para la extracción de hidrocarburos”, agregó.