Ciudad de México.- Previo al siguiente partido entre Cruz Azul y Chivas, Uriel Antuna se disculpó por haber besado el escudo de la Máquina en un partido del año pasado y aseguró que esta situación no volverá a repetirse.
“Me tocó festejar así, eso no va a volver a pasar; no es un festejo adecuado para un exequipo. Me equivoqué porque, al final de cuentas, estuve ahí y se merece un respeto por lo que es la institución; no va a volver a pasar. Pedir (sic) una disculpa, todo mi respeto para Chivas y que gane el mejor”, manifestó.
Antuna vistió la playera rojiblanca por dos años, en los que jugó 64 partidos y metió seis goles; en contraparte, con Cruz Azul ha participado en 88 juegos, con 21 tantos y 14 asistencias.
“Agarré un cariño al club porque la afición me ha estado apoyando desde siempre; me ha estado yendo mejor, tanto aquí como en la Selección; y bueno, se le agarra un cariño cuando van bien las cosas.
Al final de cuentas, como dije anteriormente, en Chivas no se me dieron bien las cosas, y no quiere decir que haya sido un fracaso; al final de cuentas, es futbol, no se dieron las cosas y no queda más que seguir trabajando. Cuando te va bien y cuando te va mal, seguir trabajando y seguir creciendo”, compartió el futbolista.
Sobre su buen rendimiento con los cementeros y la deuda que dejó en Guadalajara, Antuna reconoció que en La Noria ha adquirido la madurez necesaria para explotar su mejor versión dentro de la cancha.
“Es futbol, no sé decir una respuesta concreta. Aunque sí me enfoqué un poco más, con más madurez, dentro y fuera de la cancha. Cometí demasiados errores cuando estuvo en Chivas que ahora los vengo corrigiendo. Es eso, al final me di cuenta de lo que realmente era importante y enfoqué en lo que tengo que hacer”, comentó.
Con información de Récord.