Si hubo un tema que irritó de manera importante a los sonorenses durante 2023, fue el cobro de la energía eléctrica por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Y es que el verano pasado las quejas de miles de usuarios de CFE fueron una constante, ya que los recibos de luz llegaron a los hogares con montos totales que duplicaban o hasta triplicaban los cobros de la temporada de calor del 2022.
Esto, a pesar de que muchos usuarios aseguraron haber mantenido sin cambios el número de aparatos de refrigeración, televisiones o refrigeradores en sus hogares.
La molestia entre los usuarios, además de verse claramente reflejada en redes sociales, se trasladó a las calles con importantes marchas y manifestaciones encabezadas en la capital del Estado por la Unión de Usuarios.
En primera instancia, CFE argumentó que la responsabilidad de los aumentos en los recibos fue de los propios usuarios, ya que elevaron su consumo de kilowatts/hora y esto ocasionó que muchos salieran de los rangos de consumo subsidiados por la tarifa 1F.
Lo que omitió decir CFE fue el aumento de 7.8% que tuvieron las tarifas eléctricas en 2023 y que desde luego también contribuyó al incremento en el costo de los recibos.
Por otro lado, fue evidente que 2023 quedará marcado como el año más caluroso desde que se llevan registros de temperatura a nivel mundial, lo que es consecuencia del cambio climático que estamos experimentado y que seguirá intensificándose en los próximos años.
Por tanto, en regiones de calor extremo como es el caso de Sonora, en los próximos años experimentaremos veranos todavía más extremos y, por lo tanto, el consumo y costo de la energía eléctrica seguirán incrementándose.
Ante este panorama, el Gobierno del Estado anunció en septiembre pasado que había negociado y conseguido con CFE la eliminación del tercer rango de “consumo intermedio alto” para evitar los picos de cobros excesivos en el servicio.
Esto implicaba que de tres rangos de tarifas subsidiadas que se manejaban en el recibo de CFE: baja, intermedia e intermedia alta, se eliminaría esta última, que es donde pega un salto importante la tarifa eléctrica doméstica.
Por lo tanto, sólo quedarían dos rangos de tarifas subsidiadas, la primera que era de cero a 300 kilowatt-hora y se ampliaría de cero hasta los mil 200 kilowatt-hora con el costo más bajo, mientras que el segundo rango quedaría de los mil 200 a 2 mil 500 kilowatt-hora, también con una tarifa significativamente menor.
Lamentablemente, parece que en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y CFE no se dieron por enterados de estos acuerdos con el Gobierno de Sonora.
Este mes de enero en la página de CFE se publicó el oficio con el que Hacienda da a conocer el factor de ajuste para aumentar las tarifas eléctricas en 2024 y en este documento no se ve ningún rastro del acuerdo anunciado en septiembre por el Gobierno estatal.
Para 2024 los rangos de consumo de la tarifa 1F siguen exactamente igual que en 2023 y de “pilón” se anuncia un incremento a las tarifas domésticas de 4.3% para este año que apenas comienza.
En mayo de 2024, si por el calor usted consume en su hogar más de 1,200 kilowatts/hora la tarifa que le cobrará CFE saltará de 0.955 centavos por kilowatt a 2.322 pesos, es decir, casi el triple. Justo eso es lo que se dijo que se evitaría con el anuncio del gobierno estatal, pero que ahora queda en duda.
Por lo tanto, si este verano hace más calor que en 2023 y los usuarios de nuevamente cuenta elevan su consumo de electricidad, los recibos de CFE que lleguen a los hogares serán todavía más altos que el año pasado.
Una de dos: O CFE y SHCP engañaron al Gobierno de Sonora haciéndole creer que sí ampliarían los rangos de consumo para 2024, pero decidieron no hacerlo, o bien, el Gobierno del Estado se sacó de la manga el anuncio para aminorar el descontento social, pero la modificación no estaba acordada en firme con CFE y SHCP.
La verdad es que cualquiera de las dos situaciones serían lamentables, ya que al final de cuentas dejan en la incertidumbre a miles de usuarios domésticos en Sonora, quienes no aguantarán otro verano más pagando recibos de luz de 8 mil, 10 mil o 12 mil pesos mensuales.