Till Lindemann, vocalista de la exitosa banda de metal Rammstein, enfrenta varias acusaciones de agresión sexual por parte de más de una docena de admiradoras que asistieron a sus conciertos en Alemania.
En plena gira por Europa, Till Lindemann ha sido señalado por varias mujeres frente a medios alemanes, declarando que el vocalista suministra drogas contra su voluntad para posteriormente ser abusadas por el letrista de 60 años.
El caso comenzó en mayo de este año con el testimonio de una joven irlandesa de 24 años, pues denunció a Lindemann de drogarla y abusar sexualmente de ella después de un concierto en Lituana. Esto lograría consigo que otras víctimas levantaran su voz, y se informa que los casos entre ellas son muy similares.
Según medios internacionales, las admiradoras serían localizadas en primera fila de los conciertos, siendo fotografiadas o filmadas para que el vocalista escogiera a su próxima víctima. De esta manera, el integrante de Rammstein las invitaría a fiestas privadas para poder ser atacadas por él, algunas siendo drogadas de antemano.
Ante ello, la banda lanzó un comunicado abordando el tema, donde niegan rotundamente lo declarado por estas mujeres:
“Las publicaciones de los últimos días han causado irritación y preguntas entre el público y en especial entre nuestros fans. Las acusaciones nos golpearon a todos muy duro y las tomamos muy en serio.
Les decimos a nuestros fanáticos: es importante para nosotros que se sientan cómodos y seguros en nuestros espectáculos, delante y detrás del escenario.
Condenamos cualquier tipo de transgresión y te pedimos:
no incurrir en prejuicios públicos de ningún tipo contra quienes hayan hecho alegaciones. Tienes derecho a tu punto de vista.
Pero nosotros, la banda, también tenemos derecho, es decir, a no tener prejuicios tampoco“, escribieron en el post.
Ante las acusaciones, el gobierno Alemán ha pedido medidas de protección para el público femenino que acuda a Rammstein.
“Las jóvenes deben estar mejor protegidas contra las agresiones”, declaró a AFP la ministra alemana de la Familia, la ecologista Lisa Paus.
Así, la ministra propone la creación de zonas de protección para las mujeres en los conciertos, así como de equipos que puedan intervenir en caso de agresión sexual.
“Hay que discutir ‘rápida y concretamente’ medidas de protección”, afirma Paus, para quien “sería útil un debate serio sobre la responsabilidad de los artistas y organizadores respecto a a sus aficionados”.
De esta manera, en el estadio olímpico de Múnich donde hay cuatro conciertos programados para la semana, la zona justo delante de la escena (“Fila Cero”) en la que el cantante podría ver a las jóvenes será eliminada.
Con información de RPP.