Comenzar de cero significa aceptar que ha llegado el momento de transformar hábitos y creencias que hemos abrazado consciente e inconscientemente durante años.
Sin embargo, es común tener sentimientos y emociones encontradas. La sola idea de volver a empezar de nuevo, ya sea en tu vida personal o profesional puede ser sumamente abrumador si no tienes idea de qué puede seguir o qué pasos tomar. Hay situaciones que se presentan en la vida que nos llevan a comenzar de nuevo o reconstruir nuestras vidas.
Si estás en alguna situación donde te ves obligado a empezar de nuevo, cómo percibes lo que vives determinará si permites que el miedo o la resistencia te paralicen y eviten que sigas adelante o ver esa situación como un nuevo comienzo. Empezar de nuevo entonces implica cambiar algo que sabemos que no está funcionando en nuestras vidas. Requiere de valentía, constancia y determinación porque es muy probable que tengamos que hacer cosas que no habíamos hecho antes.
Todas las personas viven situaciones adversas. Algunas de las situaciones que pueden llevarte a empezar de nuevo son: terminar una relación de muchos años, cambiar de carrera profesional, mudarte a una ciudad o país nuevo, lidiar con problemas o pérdidas económicas, perder un ser querido, sufrir alguna una lesión, accidente o enfermedad, desear un cambio de vida. Es importante reconocer que comenzar de nuevo es entonces una decisión. Necesitarás comprometerte contigo mismo para lograr los cambios que quieres ver.
Acepta la situación en lugar de resistirla, esto te ayudará a reconocer aquello que no estas alcanzando a ver o negando. Suelta lo que ya no te sirva y así podrás ver tu panorama con una perspectiva mucho más fresca y así descubrirás las áreas de oportunidad que tienes a tu alcance. Dedica tiempo para hacer introspección y analizar cómo llegaste a dónde estás, qué decisiones tomaste y qué pudiste haber hecho diferente. Por último, encuentra motivación en razones que realmente alimenten tu propósito y te inspiren para seguir adelante día tras día.