Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, afirmó que su administración no aspira a ser una dictadura o al totalitarismo, sino que pugna por garantizar el derecho a disentir y consolidar la democracia.
Frente al sector empresarial de Nuevo León, así como el gobernador del estado, Samuel García, el mandatario nacional recordó que junto a Alfonso Romo, otrora jefe de la Oficina de la Presidencia, tuvo una tarea difícil al inicio de la administración federal.
“Como gobierno tenemos que atender, y escuchar, respetar a todos y garantizar el derecho a disentir y consolidar la democracia. Dejar asentado un verdaderos sistema democrático. No aspiramos a una dictadura, al totalitarismo, queremos la democracia como forma de vida y de gobierno. Entonces eso implica garantizar las libertades”, aseveró.
Al encabezar la firma de los acuerdos “Agua para Nuevo León, plan de apoyo”, López Obrador dijo que su distintivo como gobierno es darle atención preferente a los humildes y pobres.
“Por el bien de todos, primero los pobres y eso es la felicidad, no se consigue más que de manera transitoria con lo material o títulos o la fama, la verdadera felicidad es estar bien con uno mismo, la conciencia y el prójimo. Eso es lo que estamos haciendo en el gobierno, ese es el asento, el subrayado de lo que nosotros estamos llevando a la práctica: democracia, libertad y justicia social”, expresó.
Sobre Estados Unidos, el presidente López Obrador manifestó que su gobierno siempre ha procurado resolver de manera pacífica y mediante el diálogo todas las diferencias.
“No pelearnos con el gobierno de Estados Unidos. Yo he expresado al presidente Joe Biden que ya no aplica la frase de Porfirio Díaz, según la cual ‘pobre México tan lejos de Dios y cerca de Estados Unidos’. Le he dicho a Biden que ‘bendito México, tan cerca de Dios y no tan lejos de Estados Unidos'”.
