El Hospital General IMSS-Bienestar de Culiacán inició un proceso de credencialización de su personal con el objetivo de reforzar la seguridad tras recientes incidentes violentos en la zona. La medida busca controlar de manera más estricta el acceso a las instalaciones para proteger a pacientes y trabajadores.
En un comunicado, el IMSS Bienestar Sinaloa informó que se entregarán credenciales para establecer un registro único de los empleados. El propósito es garantizar que únicamente el personal médico autorizado pueda ingresar a áreas sensibles del hospital. Para ello, un equipo especializado en tecnologías toma fotografías a los trabajadores, quienes recibirán sus identificaciones en los próximos días.
Las credenciales incluirán características técnicas avanzadas de seguridad, como chip NFC, hologramas visibles bajo luz ultravioleta y candados de seguridad. También permitirán escanear la tarjeta desde un dispositivo móvil para acceder a la base de datos del trabajador. Estas innovaciones dificultan la falsificación y aseguran que solo personal registrado pueda entrar a las instalaciones.
En redes sociales, el IMSS Bienestar del estado anunció:
“En el Hospital General del IMSS Bienestar de Culiacán iniciamos la credencialización del personal de salud con tecnología avanzada: chip NFC, hologramas de seguridad y registro digital. Esta medida fortalece el control de acceso y protege a nuestro personal, pacientes y sus familias”.
La decisión responde a dos incidentes graves ocurridos recientemente. El más reciente ocurrió el 17 de septiembre, cuando una mujer identificada como Sandra “N” suplantó a una enfermera. Ella intentó inyectar a un paciente con heridas de bala, quien la acusó de intento de asesinato. Según sus declaraciones, la mujer estaba en el hospital para reforzar su conocimiento profesional, aunque no tenía vínculo laboral con la institución. El paciente herido fue identificado como “LV” y presuntamente tiene vínculos con una estructura del Cártel de Sinaloa.
El otro incidente ocurrió a finales de agosto, cuando un paciente con heridas de bala fue asesinado dentro del hospital. Los agresores ingresaron vestidos como personal médico, lo que evidenció la vulnerabilidad de los sistemas de identificación y acceso existentes.
Estos hechos resaltan la urgencia de implementar mecanismos más rigurosos de identificación en hospitales públicos de la región.