El expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, y su esposa, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, fueron citados a comparecer ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes en el marco de la investigación legislativa sobre el caso Jeffrey Epstein, el financiero acusado de operar una red de tráfico sexual de menores antes de morir en prisión en 2019.
La citación forma parte de un llamado a declarar a diez personas, que incluye también a seis exfiscales generales y dos exdirectores del FBI.
El comité, encabezado por el republicano James Comer, busca esclarecer posibles omisiones y responsabilidades en el manejo del caso por parte de autoridades pasadas.
Bill Clinton ha reconocido haber tenido una relación social con Epstein y haber volado en su avión privado para actividades relacionadas con la Fundación Clinton, pero ha negado rotundamente haber tenido conocimiento de sus crímenes o haber visitado su isla privada.
Esta nueva fase de la investigación se da tras una votación en la que se solicitó formalmente al Departamento de Justicia entregar todos los archivos del caso Epstein.
Aunque las autoridades concluyeron recientemente que no existe una lista de clientes de Epstein con nombres de figuras públicas, las demandas por transparencia siguen creciendo, particularmente desde sectores conservadores que presionan para que la Administración de Donald Trump —bajo cuyo mandato se desarrollaron las primeras etapas del proceso judicial contra Epstein— haga pública toda la información disponible.
La figura de Trump también ha sido vinculada al caso. Según The Wall Street Journal, en 2003 envió a Epstein una carta de felicitación con un dibujo explícito, aunque el expresidente ha negado el hecho. Ambos mantuvieron contacto durante los años noventa e inicios de los 2000.
En paralelo, Ghislaine Maxwell, socia cercana de Epstein y actualmente condenada a 20 años de prisión por tráfico sexual, solicitó inmunidad o un indulto a cambio de testificar ante el Congreso, como lo ha solicitado el comité legislativo. La posible comparecencia de Maxwell agrega tensión a un caso que continúa generando controversia política y social en Estados Unidos.
Con información de EFE.