Nueva York.– El gobierno de Estados Unidos notificó oficialmente al juez Brian Cogan, de la Corte Federal en Brooklyn, que no buscará la pena de muerte contra Ismael “El Mayo” Zambada García, exlíder del Cártel de Sinaloa y uno de los narcotraficantes más influyentes de las últimas décadas.
La decisión fue comunicada a través de una carta firmada por el fiscal Joseph Nocella Jr., quien informó que la determinación fue tomada directamente por la fiscal general de Estados Unidos, Pamela Bondi.
“Querido juez Cogan: el gobierno respetuosamente presenta esta carta para informar a la corte y a la defensa que la fiscal general ha autorizado y ordenado a esta oficina no buscar la pena de muerte en contra del acusado Ismael Zambada García”, se lee en el documento oficial.
Zambada García enfrenta 17 cargos criminales en la Corte del Distrito Este de Nueva York, relacionados con tráfico internacional de drogas —incluido fentanilo, cocaína, metanfetamina, mariguana y heroína— además de lavado de dinero y uso de armas de fuego, dentro del mismo caso que involucra a su exsocio y compadre, Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
La decisión del Departamento de Justicia se da poco más de un año después de la detención de Zambada, ocurrida el 25 de julio de 2024 en Nuevo México, Estados Unidos.
Según reportes de inteligencia, el arresto fue producto de una presunta traición por parte de Joaquín Guzmán López, ‘El Güero’, hijo de ‘El Chapo’, quien habría entregado a Zambada como parte de una negociación con autoridades estadounidenses para obtener beneficios penitenciarios para él y su hermano Ovidio Guzmán, ya preso en EEUU.
Durante una audiencia celebrada el pasado 16 de junio, se esperaba que la fiscalía definiera si aplicaría el Protocolo de Pena Capital en su contra, pero la decisión fue postergada a solicitud del gobierno.
Desde entonces, su abogado, Frank Pérez, inició negociaciones con los fiscales para evitar la pena de muerte, lo que podría derivar en un posible acuerdo de culpabilidad por parte de su cliente.
Zambada, uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa y por décadas su principal operador, ha permanecido bajo resguardo de las autoridades estadounidenses en espera de juicio.