El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) anunció este lunes la activación de una alerta táctica, lo que obliga a todo su personal uniformado a permanecer en funciones, sin excepción. La decisión se comunicó mediante la cuenta oficial de la corporación en la plataforma X, antes conocida como Twitter.
Esta medida responde al clima de tensión que persiste en la ciudad tras las redadas ejecutadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) el pasado viernes. Desde entonces, se han multiplicado las protestas, los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y los saqueos en diversos sectores del área metropolitana.
La alerta táctica es un recurso extraordinario que permite al LAPD extender los turnos de sus agentes, reorganizar su despliegue y priorizar la atención de situaciones de alto riesgo. Este protocolo solo se activa en escenarios críticos, donde la capacidad operativa ordinaria resulta insuficiente.
Según explicó la corporación, la medida no se toma con frecuencia y responde a la necesidad de reforzar la presencia policial en calles, edificios gubernamentales y zonas vulnerables. Las autoridades federales mantienen además el apoyo militar con la presencia de elementos de la Guardia Nacional y del Cuerpo de Marines.
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Los Ángeles continúa en estado de alerta, mientras organizaciones civiles exigen el cese de las detenciones y denuncian el uso excesivo de fuerza contra manifestantes.