La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó aún no existe una fecha definida para reanudar la exportación de ganado bovino a Estados Unidos, luego del cierre fronterizo implementado por Washington desde el 11 de mayo ante la reaparición del gusano barrenador en el sur del país.
En conferencia desde Palacio Nacional, Sheinbaum detalló que una misión sanitaria del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA) se encuentra en territorio mexicano para evaluar las medidas de contención aplicadas por el Gobierno ante esta plaga ganadera de alto riesgo.
“Ahorita todavía no hay una fecha para la reapertura. Va avanzando [la revisión] y el secretario [de Agricultura, Julio Berdegué] les puede dar los detalles”, indicó la mandataria.
El gusano barrenador, una larva que infecta animales con heridas abiertas y que también afecta a caballos, cerdos, ovejas e incluso fauna silvestre, reapareció a fines de 2024, tras haber sido erradicado en México en 1991.
Por su parte, el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Julio Berdegué, informó esta semana que ya iniciaron las reuniones técnicas con funcionarios estadounidenses en la Ciudad de México, quienes revisarán los avances de la estrategia nacional contra el gusano barrenador.
Berdegué también destacó que se trabaja en la próxima operación de una planta de insectos estériles en el sur del país, una herramienta clave para el control biológico de la plaga.
Mientras tanto, el impacto económico por el cierre comienza a sentirse a ambos lados de la frontera. La presidenta Sheinbaum señaló que empresarios cárnicos estadounidenses ya manifiestan preocupación por el desabasto.
“Ayer leí una nota de empresarios de la carne en Estados Unidos que ya están pidiendo que se abra la frontera porque ya tienen problemas de desabasto en EE.UU.”, dijo.
El cierre afecta especialmente a productores ganaderos del norte de México, donde la exportación de ganado en pie es una fuente esencial de ingresos y empleo. Según estimaciones del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), las pérdidas para el sector podrían alcanzar los 11.4 millones de dólares diarios mientras se mantenga la suspensión.
La reapertura dependerá del dictamen técnico de la misión estadounidense y de que México demuestre control efectivo sobre la propagación de la plaga. Por ahora, el mensaje oficial es claro: no hay fecha aún para reabrir la frontera.