Deseo abrir este nuevo año, con este tema tan importante, ya que hacer cumplir las leyes que existen en materia ambiental, nos ayudan a proteger no solo la salud humana si no también la del medio ambiente.
Traigo esto a colación, ya que existe mucha inquietud por parte de algunos municipios de cómo se va aplicar la nueva modificación de la Ley de Protección Ciudadana contra los Efectos Nocivos del Tabaco, la cual, fue impulsada desde nuestra Asociación Civil y está se encuentra vigente desde junio del 2022.
Una de las prioridades de esta modificación es disminuir los daños que ocasionan las colillas de cigarro en nuestros ecosistemas y proteger la salud de la sociedad, ya que las sustancias que contienen dichos residuos, son altamente tóxicas.
Sin embargo, aún falta algo tan importante para que los municipios puedan integrar a sus acciones ambientales, lo que establece esta ley, y eso es, voluntad por parte de las instancias que les compete la divulgación, aplicación y vigilancia de dicha ley.
Lo preocupante es, en sí, la Sociedad que consume tabaco, ya que ellos no tienen algún centro de acopio donde puedan dirigir las colillas de cigarro. Si se pudiera implementar algo como lo que realiza el Ayuntamiento de Hermosillo, en donde por iniciativa propia, reciben las colillas de cigarro y las envían a su disposición final, sería grandioso para el resto de los municipios.
Ya que no podemos perder el interés de las personas y grupos ambientales de los municipios que han trabajado mucho en romper con ese mal hábito que se tiene de arrojar las colillas de cigarro en donde sea.
Derivado de lo anterior, se requiere que las instancias competentes, toman en serio la aplicación de esta ley, así como todas las que desean proteger nuestra naturaleza y la salud de las personas que habitamos en ella.
Espero y este año, salgamos del dicho que común mente conocemos: “el problema del Derecho ambiental en México no es la carencia de leyes, sino su aplicación”.
Solo para culminar, me gustaría recordar algunos datos relevantes sobre las colillas de cigarro y por qué mi preocupación. Según lo que señala las Naciones Unidas, Las colillas son el residuo más desechado de todo el mundo sumando anualmente cerca de 766,6 millones de kilogramos de basura tóxica. Las sustancias químicas nocivas de los microplásticos causan la mortandad a largo plazo de la vida marina, entre ellas la de las aves, los peces, los mamíferos, las plantas y los reptiles.
Posteriormente, estas sustancias tóxicas entran en la cadena alimenticia y conllevan graves impactos en la salud de las personas como cambios genéticos, el daños cerebrales y afectaciones en la velocidad de la respiración, entre otras.
Entonces, si ya tenemos una ley que puede reducir esos impactos, ¿Por qué no aplicarla?
Lic. Pamela Ibarra Dávila
Presidenta de Cultura Verde Amor por el Planeta A.C.