Por Ana Luisa Casas, Armando Ríos y Paloma Gatica
Saltillo, Coahuila.- La madrugada del jueves, Gerardo “N.”, identificado como el subdirector de la escuela primaria Urbano Flores, fue asegurado por las autoridades.
“Mi hija no se suicidó, a mi hija la mataron de la peor manera”, aseguró Irma Aracely, la madre de Valentina, quien se habría quitado la vida tras ser víctima de abuso sexual.
Por ello, exigió justicia y exhortó a las autoridades de educación para dar seguimiento a las investigaciones y que otras niñas no sean víctimas del mismo delito que pudo orillar a su hija a quitarse la vida.
“¿Qué sintió, qué pasó por su cabeza? Eso no lo sabemos, ella era una niña feliz y contenta, quería ser arquitecta y le gustaba jugar a la patineta”, expresó su madre entre lágrimas, tras acudir a una reunión con autoridades educativas de la primaria Urbano Flores, de la que Valentina era alumna.
Tras darse a conocer que la menor habría sido víctima de abuso sexual, previo a decidir terminar con su vida, decenas de padres de familia llegaron a la institución educativa ayer por la mañana para hablar sobre el caso, ante el temor de que sus hijos e hijas pudieran estar en una situación de riesgo.
Subdirector va a penal
Anoche, Gerardo “N” fue ingresado al penal de Saltillo. Se espera que en las próximas horas se lleve a cabo la audiencia inicial.
Mientras tanto, la directora de la primaria, Beatriz Huitrón, fue separada del cargo ante la protesta de los padres por supuesta omisión en el caso y quejas previas hacia el subdirector, por malos tratos.
“La directora Beatriz Buitrón fue separa del cargo, y quedó como encargado José Guadalupe Monsiváis, supervisor de la Secretaría de Educación”, apuntó Jesús Héctor Barrera Villarreal, jefe de sector de primarias federalizadas.
Durante las primeras horas de ayer, también trascendió en redes que había otro caso donde supuestamente se denunciaba violencia sexual por parte del empleado; sin embargo, este caso no fue confirmado por la Fiscalía.
Abusos empujan la idea de querer morir: expertas
La comisión de delitos sexuales empujan la idea de querer morir junto a muchos otros factores, aseguró la directora de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónomo de Coahuila, Berenice de la Peña, quien explicó que aunque no es en automático, mucho se debe a la forma en que la situación fue llevada.
Señaló que un abuso sexual o cualquier otro delito sexual dejan una huella profunda difícil de sanar que cuando no es atendida como debería la persona tiende a desarrollar la idea de querer morir ante la desesperanza.
Por su parte, la experta Karla Patricia Valdés, exdirectora de la misma institución, afirmó que haber sido víctima de un abuso sexual o cualquier otro delito sexual es un factor importante para detonar el intento de quitarse la vida.
“Obviamente a menor edad este factor tiene un mayor impacto en la vida de la víctima, definitivamente desde una perspectiva psicológica afecta la integridad autoestima, la seguridad, muchos aspectos se ven afectados, tiene también el aspecto que se debe considerar cómo se vivió, si se recibió ayuda o no, o si no le creyeron”, expresó Valdés.
Con información de Vanguardia
