Una manifestación de los trabajadores del Ayuntamiento de Hermosillo causó el cierre de las avenidas Pino Suárez y Rosales, en el Centro de la ciudad, donde los afectados demandaron que se les hagan valer y respetar sus derechos laborales, así como las cláusulas del contrato colectivo que mantienen con el municipio.
Falta de pago de bonos y de puntualidad e irregularidades en el contrato de trabajo son los motivos que movieron a un grupo de trabajadores del Ayuntamiento a manifestarse en las calles de Hermosillo durante este martes 17 de agosto. Asimismo, personal pensionado y jubilados se unieron para reclamar de igual forma la falta de apoyo que padecieron el pasado mes de junio. Estas anomalías en el cumplimiento de contrato han afectado a mil 500 trabajadores y a 250 jubilados.
El secretario general del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Municipio de Hermosillo (SUTSMH), Salvador Díaz Holguín, informó que además de los bonos escolares para los hijos de los trabajadores y el bono de puntualidad, no se han respetado otras condiciones como 70 apoyos funerales y apoyos de salud, que van desde los mil hasta los 50 mil pesos.
Si bien el contrato colectivo de trabajo del sindicato se encuentra presupuestado, en el sindicato desconocen y lamentan el actuar de las autoridades municipales en esta situación: “Es el mismo actuar que la administración pasada, lamento mucho que estén tomando esas acciones, pero no podemos bajar la voz”, comentó. “Dicen ellos que no hay dinero para pagar lo presupuestado. (…) No sé qué pasó. El dinero ya debe de existir. Si están haciendo bien o mal manejo del dinero ya es responsabilidad de ellos”, agregó el secretario.
En la espera de una respuesta por parte de la administración actual, Díaz Holguín advirtió que, de no conseguirla en las próximas horas, la manifestación del sindicato volverá a las calles hasta que consigan hablar con el Ayuntamiento: “No vamos a quedarnos callados, vamos a exigir, vamos a hablar, vamos a decirle a la ciudadanía. Lo que menos quiero yo es afectar al ciudadano, pero lamentablemente la autoridad no nos escucha. No vamos a bajar la guardia”.