¿Y cómo se defienden los árbitros en tu país? Pues en Honduras un silbante sacó una pistola para protegerse de los aficionados que se molestaron por su trabajo.
Durante un encuentro en el Campeonato de Barrios, los seguidores y jugadores del equipo perdedor fueron a reclamarle al árbitro por no marcar un penal en la recta final del encuentro.
Sin embargo, en el video que circula en redes sociales se aprecia como empezaron a alejarse del colegiado y se ve que éste trae una pistola en la mando, mientras se escuchan un par de detonaciones.
Al final, el silbante se retira del campo mientras algunos de los seguidores y aficionados sonríen irónicamente.