Si alguna vez ha sentido deseos incontenibles de comprar algo, tantos que experimentas ansiedad, y luego, al tenerlo llega la sensación de euforia, y posteriormente de culpa hasta caer en depresión porque no hay recursos para pagar. Entonces podrías ser un comprador compulsivo y sufrir de oniomanía. (ausencia de control para adquirir algo)
Los términos compra compulsiva, adicción a las compras u oniomanía hacen referencia a las personas que viven preocupadas con las compras y que experimentan episodios recurrentes de pérdida de control en su conducta compradora que conlleva marcado malestar e incluso problemas sociolaborales, familiares, legales o financieros. La compra compulsiva por internet se ha relacionado con mecanismos emocionales tales como la búsqueda de placer o la evasión de emociones negativas, y con mecanismos cognitivos tales como impulsividad o fracaso en el autocontrol y en la toma de decisiones, especialistas han demostrado el paralelismo con el juego patológico y las adicciones a sustancias, especialmente en lo que respecta a las señales desencadenantes del deseo. Hasta ahora había poca investigación recogida sobre compra compulsiva en internet, pero es una evidencia que el comercio generalizado en internet aumenta de manera mantenida, lo que nos puede hacer pensar que cada vez más personas van de compras a la red y por lo tanto este problema esté en auge. Y lo está porque internet proporciona al comprador una serie de ventajas, como poder comprar a cualquier hora del día, comprar desde el anonimato del propio hogar y usar medios de pago que generan gastos inadvertidos. La cuestión que nos planteamos es si la compra patológica online es una variante clínica o simplemente es consecuencia de haber trasladado el comercio minorista a internet. Si está constatado que comprar sin ser observado, evitar la interacción social, la presencia ilimitada de la oferta en internet y la posibilidad de satisfacer inmediatamente la urgencia por comprar condicionan la compra patológica, no nos extraña que estudios sistematizados demuestra que la compra patológica online se asocia con mucha más excitación, reactividad y diversión. En la adicción a internet, se supone que un sujeto con predisposición a la excitación con las compras encontrará en internet lugares donde satisfacer sus deseos de forma rápida, sencilla y discreta. Las señales disparadoras de esta conducta de compra son la base emocional y motivacional para experimentar el antojo de compras.
Finalmente es importante precisar que este trastorno representa uno de los problemas actuales más graves, que en la mayoría de los casos esta conducta compulsiva se esconde en el marco de la discrecionalidad, dado que social y culturalmente se promueve tener bienes materiales y un estatus que nos haga sentirnos mejores personas, incluso más atractivos. Para algunos psicólogos este comportamiento puede darse como una respuesta ante emociones primarias como venganza y aburrimiento.
A la fecha, la compra compulsiva es tratada como trastorno al juego o ludopatía que no es otra cosa como la incapacidad de la persona de abstenerse y detenerse en el juego, lo cual, está considerada como conducta adictiva, desde la perspectiva de la psicología.
Por Psic. Dr. Sergio Oliver Burruel