Hermosillo, Sonora.- El primer aniversario de la llegada del covid-19 a Sonora se cumplió con el Semáforo de Riesgo Epidemiológico en verde, un color que costó más de 68 mil contagios y más de 5 mil 800 muertes. A doce meses de distancia del primer caso, el estado se enfrenta hoy a una especie de tregua para la población, la economía y los servicios de salud.
Sin embargo, a pesar de la esperanza que representa el actual descenso en la pandemia, la posibilidad de una tercera ola de contagios mantiene preocupados a especialistas e instituciones sanitarias: más que una retrospectiva, interesa una proyección hacia lo que viene, con base en las experiencias del pasado.
El virus no se ha ido y, si las medidas de distanciamiento social se relajan en la próxima temporada vacacional de Semana Santa, la amenaza sería similar a la de las primeras dos olas tanto en defunciones y nuevos casos, como en pérdidas económicas y laborales.
El sábado 13 de marzo, la Secretaría de Salud en Sonora ofreció una conferencia para hablar al respecto: de acuerdo con sus estimaciones, en el peor de los escenarios, se alcanzarían hasta 2 mil defunciones y hasta 22 mil contagios adicionales luego de las vacaciones. Además, por su calificación actual, Sonora se encuentra pegado al margen previo al color amarillo, por lo que habrá de mantenerse algunas semanas en color verde para hablar de un control en la pandemia.
El doctor Universo Ortiz, subdirector de Epidemiología de la Secretaría de Salud en Sonora, lo confirmó:
“Lo que se espera a futuro es relativamente incierto, pero, con la experiencia que tenemos, podemos afirmar y estar pendientes de las próximas fechas que vienen: Semana Santa es un riesgo muy grande para que el aumento de movilidad se traduzca en una tercera oleada”, dijo el especialista, “en lo primero que tenemos que estar conscientes y recalcar a la población, es que un semáforo verde no significa un riesgo nulo, sino bajo: el riesgo siempre está latente, eso es lo fundamental, que el semáforo verde no significa una apertura total ni un regreso a la normalidad como antes de la pandemia”.
A un año de distancia, los semáforos municipales sí han ayudado a controlar los contagios con las restricciones específicas, apuntó, pero también la Secretaría de Salud es responsable de reforzar la vigilancia para que no se “escapen” casos del virus.
“En Epidemiología estamos recomendando que no se relajen las medidas y nos toca seguir reforzando la vigilancia, porque, sin una vigilancia en salud adecuada, se pueden estar escapando casos que serían importantes para tener un semáforo real”, sostuvo.
De acuerdo con el aviso epidemiológico más reciente, publicado el 11 de marzo pasado por la Secretaría de Salud, se acumularon 7 mil 745 trabajadores del sector salud contagiados de covid-19, de los cuales, 112 fallecieron. Pero, con el inicio de la vacunación, los casos dentro del personal hospitalario han disminuido drásticamente, aseguró Ortiz.
“De esas defunciones, 100 se dieron antes de la vacunación al personal de salud·, agregó el médico, “ha disminuido muchísimo porque, de reportar de 40 a 60 casos de covid diarios en un momento, ahora estamos reportando de dos a cinco, y hay días con ni un solo caso posterior a la vacunación; esto indica lo importante que es la vacunación como una medida de prevención que, cuando se extienda a la población en general y a los adultos mayores, estimamos que sea efectivamente algo que por fin nos ayude a que esto se controle de una forma más efectiva”.
HOSPITALES
Actualmente, la ocupación hospitalaria también se ha mantenido por debajo del 15% en las últimas semanas. Hasta el 13 de marzo, se contaba con 766 camas disponibles y 83 ocupadas.
“Con estas disminuciones y el desahogo de las unidades, efectivamente es un respiro para el personal de salud, pero ahí viene la reflexión de que, si nosotros nos relajamos con las medidas, vamos otra vez a empezar a saturar al personal y, con un año de desgaste tanto físico como mental, se hace más difícil sobrellevar, por eso es importante como población mantener las medidas básicas, mientras no tengamos el 75% de vacunación; en efecto, tenemos ya la luz al final del túnel, pero tenemos que estar conscientes de que tenemos que dar el último esfuerzo”.
El desgaste de la población a un año de distancia es evidente, agregó, sin embargo, la insistencia en la prevención es esencial e impostergable: no se trata solo de las medidas y protocolos impuestos por las autoridades, sino de la disposición de la gente por acatarlos.
“Así vamos a tener una ganancia muy importante en cuanto a evitar una tercera oleada incluso más grande que la segunda y la primera porque, en Sonora, nuestra segunda oleada fue equivalente o más grande que la primera, registramos muchos casos y defunciones; no queremos tener una tercera oleada equivalente”.
VACUNACIÓN
Concepción Félix, encargada estatal de vacunas en Sonora, señaló que, con corte al 11 de marzo, se han aplicado 85 mil 572 dosis de vacunas a adultos mayores en 58 de los 72 municipios del estado, así como a más de 20 mil integrantes de primera línea del sector salud.
Rumbo a finales de marzo y la primera semana de abril, se prevé el inicio de la vacunación para adultos mayores de Hermosillo, donde se requieren más de 96 mil dosis, mientras que, en las próximas semanas, se terminará de cubrir a 8 mil trabajadores de salud de segunda línea en el estado.
“Estamos trabajando con el Plan Nacional de Vacunación contra el SARS-CoV-2 para la prevención de covid-19, iniciamos la vacunación al personal de primera línea a partir de enero y ahora, entre febrero y marzo, iniciamos la vacunación a adultos mayores de 60 años en municipios menores de mil habitantes, en 45 de los 72 municipios [con la vacuna AstraZeneca]; en la siguiente etapa, agregamos otros ocho municipios mayores de mil habitantes y trabajamos con Sinovac; y en otros cinco municipios con Pfizer”.
Y agregó: “La vacunación es una de las intervenciones más exitosas para lograr erradicar y controlar las enfermedades, en este caso, para la vacunación en la prevención de covid-19 sí tenemos limitado el abasto y, en lo que se protege a la población, la población debería estar siguiendo las recomendaciones; pedimos su comprensión, porque, en su momento, llegará la vacuna para el personal de salud, ahorita es el prioridad el adulto mayor y hacia ellos está dirigida esta etapa; creemos que, para finales de marzo, incluso una semana más de abril, podemos estar trabajando con los demás grupos de edad”.
ECONOMÍA Y EMPLEO
Alejandro Romero, economista e investigador sonorense, apuntó que, en febrero, se generaron 11 mil 547 empleos en Sonora, lo que posicionó al estado como el segundo lugar nacional de acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sin embargo, la amenaza de una tercera ola de contagios podría representar un nuevo riesgo para la recuperación económica, con una nueva pérdida de plazas y cierre de negocios.
Fueron 39 mil 897 los empleos que se perdieron de marzo a agosto de 2020 y fue a partir de septiembre del mismo año que empezaron a recuperarse hasta lograr, en términos reales, 25 mil 13 plazas adicionales hasta el cierre de febrero de 2021.
“Estamos hablando de que ya casi se han recuperado dos terceras partes de empleos perdidos el año pasado y eso ya habla bien de Sonora”, dijo el especialista, “en contraste, a nivel nacional, solamente hay un 39% en recuperación de empleos, es decir, menos que en Sonora y lo que fue el mes de febrero es el peor mes en generación de empleos nacional en 10 años”.
En cuanto a las empresas pérdidas, desde abril de 2020 y hasta enero de 2021, Sonora perdió 622 empresas, también según la información del IMSS y, aunque parezca contradictorio hablar de una recuperación de empleos mientras existe un cierre de empresas, Romero aclaró que las pérdidas corresponden a micro y pequeños negocios, sobre todo del sector servicios, mientras que las grandes empresas son las que se recuperan y emplean a 8 de cada 10 personas en Sonora.
“Sin duda está el peligro latente y es muy real, yo creo que hay desesperación en algunos sectores y en algunas empresas por aprovechar el semáforo verde y abrir a la máxima capacidad posible y atraer las mayores ventas posibles”, manifestó Romero, “pero quizás en el pecado llevemos la penitencia más adelante: si no se hace una reapertura ordenada, si la gente no sigue tomando las medidas, sin duda habrá una tercera ola de contagios y esto, a su vez, volverá a traer el cierre de empresas, sobre todo los sectores que ya han estado muy golpeados, que son el servicio y comercio.
Por lo tanto, si no tomamos precauciones, esto también se puede manifestar en datos de empleo. No debemos confiarnos porque este inicio de año sea bueno: si hay una tercera ola de contagios y muertes y se empiezan a cerrar las actividades, sin duda lo avanzado se puede retroceder en un segundo”.
MOVILIDAD PEATONAL Y VEHICULAR
Jesús Ibarra, periodista y especialista en análisis de datos, afirmó que la movilidad peatonal y vehicular mantienen su tendencia al alza en Sonora, según el informe de tendencias de movilidad más reciente de Apple.
Hasta el 11 de marzo, se reportó un 99% más de movilidad peatonal y un 33% adicional en los viajes en automóviles, por lo que juntos suman un 132% más movilidad en Sonora que al inicio de la pandemia, en marzo de 2020.
Pero no se trata solo de que la gente se desplace más, sino de los contactos que tiene con otras personas mientras tanto, apuntó Ibarra, pues se aproximan fechas de mayores actividades lúdicas, turísticas y de comercio, unidas a las industriales.
“Sí hay una relación muy fuerte entre el alza en la movilidad, el incremento en los contactos, la relajación de las personas y un eventual rebrote o tercera ola”, sostuvo Ibarra, “si vemos los indicadores de movilidad, la de marzo está siendo mayor a la de febrero y, a su vez, a la de enero; si ahorita estamos operando bajo la lógica de los indicadores oficiales del semáforo verde -que cabe destacar que estamos en el punto más alto del semáforo verde- en cualquier momento vamos a dejar de estarlo”.
Luego puntualizó: “Si se combina todo pareciera indicar, según los modelos, la tendencia de que hay un reflejo de hasta 14 a 21 días para que se registren los primeros casos de un repunte, por ahí de la última semana de marzo y la primera de abril podríamos empezar a tener señales, primero de un repunte y después de una tercera ola”.
Lo que la pandemia ha enseñado es que, si la necesidad de salir no puede evitarse y es urgente, se puede hacer de forma responsable, concluyó Ibarra.
“Se puede tomar la delantera al virus con sana distancia, lavado de manos y uso de gel sanitizante; la movilidad peatonal de marzo de este año es mucho más alta que hace un año y eso quiere decir que, en su momento, la gente hizo mucho caso en Sonora de quedarse en casa, pero ya no: lo que muestra es que está cansada de estar en su casa, de trabajar en casa y ya no es solo fatiga, sino la necesidad de hacer su trabajo, el mandado, pagar las cuentas, propiamente, hacer su vida fuera del hogar”.
