La iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, en Villa de Seris, es un edificio que se construyó a finales de los años 40. Durante los últimos quince años la venta de tamales se convirtió en una gran tradición en ese lugar, relató el cronista de Hermosillo Ignacio Lagarda.
“Hay que recordar que apenas un mes y cachito nació Jesucristo, un 24 de diciembre, y en aquella época cuando nació, se usaba en la religión judía llevar a los niños recién nacidos, a los 40 días, a presentarlos al templo y eso fue lo que hizo la Virgen María en ese tiempo, llevar a su hijo Jesús al templo a presentarlo”, explicó.
El historiador comentó que esa tradición continuó en la época del cristianismo, que en ese entonces consistía en llevar al niño a bautizar, llevándolos envueltos en un cobija, de forma parecida a un tamal, de ahí la tradición que está relacionada con el Día de Reyes y la rosca, el 6 de enero.
“Cuando trajeron esa tradición los españoles como una tradición cristiana, los aztecas, las antiguas tribus del centro de México, ellos cultivaban el maíz, entonces ellos interpretaron a ese niño que iba envuelto en un ropón, recién nacido, en ese ritual, como un tamal, que iba envuelto en una hoja de maíz, o plátano más al sur”, precisó Lagarda.
Cada año se realiza la tradicional venta de tamales por el Día de la Candelaria en Villa de Seris. Esta comida es la principal atracción, pero debido a la pandemia de covid-19, este año se suspendieron todos los festejos para evitar contagios.
Se estima que no se venderán 14 mil tamales, entre otros ingresos, por venta de alimentos y bebidas, se calculan 400 mil pesos que no se percibirán.
“Pues, sí se va a dejar de percibir cantidades exactas no les sabría decir, sí nos va a afectar porque los pagos en la parroquia siguen, pagos de sueldos, pagos de servicios, nos va a afectar muchísimo, hasta ahorita no ha dicho el sacerdote si tiene un plan B”, comentó Carmela López, encargada de organizar la kermes.
Además, las celebraciones litúrgicas serán las más afectadas por la suspensión del evento, pues este lunes ya habrían realizado la novena, esta consiste en misas para pedir por cada caso en especial, un día por enfermos, otro por niños, otro por ganaderos, etcétera, agregó la señora.
Carmela llamó a la ciudadanía a ayudar con los gastos de la parroquia y pueden dirigirse a sus oficinas en Villa de Seris.
Por su parte, Irma, quien por 10 años ha pertenecido al grupo de celadoras y elabora tamales, lamentó la suspensión de este evento y comentó que sus compañeras están tristes por esta medida y no poder preparar la suculenta comida.
“En las fiestas de nuestra señora de la Candelaria somos las que llevamos a cabo la elaboración de los tamales, y en esta ocasión, por más de 60 años, es la primera vez se deja de hacer los tamales, pues debido a que la pandemia en la que estamos atravesando, no se va a llevar a cabo la tradicional kermés”, comentó.
Son alrededor de 30 a 50 personas encargadas de la elaboración de este producto, quienes empiezan desde el 15 de enero aproximadamente.
Se calcula unos 10 mil tamales de carne y 4 mil de elote, además de frijoles para acompañarlos.
Este martes 2 de febrero se realizará una misa virtual precedida por el arzobispo Ruy Rendon a las 12 del mediodía y a las 16:00 horas se “paseará” a la virgen por algunas calles de Villa de Seris.
La iglesia, Santuario de Nuestra Señora de la Candelaria, es administrada por el padre Sixto Toruga, esta tradición tiene al menos 70 años.