La variante de británica del coronavirus SARS-CoV-2, que es considerada mucho más contagiosa, también puede estar asociada a una mayor mortalidad, indicó este viernes el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson
“Ahora también parece haber algunos indicios de que la nueva variante, la que se identificó por primera vez en Londres y el sureste [de Inglaterra], puede estar asociada a una mayor mortalidad”, aseguró en rueda de prensa en Londres.
En el caso de un hombre de unos 60 años, la mortalidad en el país era anteriormente de 10 pacientes por 1.000 enfermos y actualmente estaría entre 13 y 14 por 1,000, explicó el principal consejero científico del ejecutivo, Patrick Vallance.
Vallance subrayó que “hay mucha incertidumbre en torno a estas cifras”. “Es preocupante que haya habido un aumento de la mortalidad, así como un aumento de la transmisibilidad”, indicó el especialista.
Hasta ahora, las autoridades sanitarias habían dicho que la nueva variante no parecía más mortífera y reaccionaba correctamente a las vacunas existentes.
“Todos los indicios actuales siguen demostrando que las dos vacunas que utilizamos actualmente siguen siendo eficaces tanto contra la antigua variante como contra esta nueva variante”, aseguró Johnson el viernes.
Al respecto, los especialistas de la Organización de la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidieron que se fortalezcan las medidas de prevención, sin importar las variantes.
“Sin importar qué variación esté circulando, tenemos que hacer todo lo posible para frenar la transmisión”, dijo en conferencia de prensa la doctora Maria Von Kerkhove, la líder técnica de COVID-19 de programa de Emergencias de la OMS. Von Kerkhove indicó que el organismo estudia muy de cerca.
La especialista estadounidense subrayó que una medida sola no frenará la enfermedad, por lo que dijo que el uso de mascarillas, de tela o quirúrgicas, debe ir acompañado de distanciamiento social y un lavado de manos constantes.
Información tomada de www.expansion.com