La tendencia para Sonora respecto a los niveles de contagios, hospitalizaciones y muertes por Covid-19 es hacia el aumento: no será estrepitoso como en el pico de la pandemia, pero sí de un nivel considerable, coinciden especialistas. En este momento, los números son similares a los registrados a finales de agosto.
Jesús Sánchez Colín, médico infectólogo, reiteró que, aún así, se aproxima una situación difícil en el último mes del año por el aumento general de las enfermedades respiratorias, como neumonías por bacterias e influenza, por las características propias de la temporada invernal, situación a la que se suma la presencia del coronavirus y sus consecuencias.
Los hospitales y el personal de salud podrían ponerse nuevamente en riesgo ante el aumento de casos graves que requieran camas y atención especializada, agregó.
“La situación puede ser un poquito más delicada, más difícil que cuando tuvimos el pico máximo de la pandemia en meses anteriores y, aparte, vienen otras situaciones porque la gente tiene dinero, quiere salir de compras, hay reuniones sociales y posadas, entonces, las festividades y las reuniones también aumentan el número de casos”, sostuvo el especialista.
De acuerdo con la información más reciente de la Secretaría de Salud en Sonora, el domingo 29 de noviembre, el estado contabilizó 251 nuevos contagios y 14 defunciones, además de 364 personas hospitalizadas. A más de ocho meses del inicio de la pandemia, ya son 42 mil 332 personas las que han adquirido el virus, 3 mil 389 las que murieron y 37 mil 171 personas las que se recuperaron.
“No hemos aprendido a llevar a cabo las medidas sanitarias que se han recomendado una y otra y otra vez”, dijo Sánchez Colín, “yo recomendaría a la gente que no se relajara en ningún momento, porque las pandemias no se van: llegan para quedarse. Yo les pongo de ejemplo que no es la única pandemia que vivimos, también tenemos la de VIH que llegó hace más de 30 años, la pandemia de la influenza AH1N1 que llegó hace 10, la influenza estacional que tiene muchos más años; entonces, que tomen en cuenta eso y que se acostumbren a vivir con las medidas implementadas porque no se podrá cortar la cadena de transmisión”.
Y agregó: “Es mejor pasar una navidad sin seres queridos, que no volverlos a tener para estar con ellos; es invertir una navidad para poder tener muchas más con la gente que queremos”.
Repunte en diciembre
Luis Armando Moreno, analista de datos y estudiante de la maestría en Ciencia de Datos de la Universidad de Sonora, dijo que, en las últimas semanas de noviembre, ha habido un repunte en el número de casos y defunciones que podría mantenerse en diciembre.
“No ha sido muy brusco el aumento de casos y defunciones, la pendiente de la recta que se dibuja en las gráficas es un poco más plana, pero ha habido un aumento en el número de casos y defunciones en el último mes y lo que apunta es que esto se siga dando ya en diciembre”, detalló, “sin embargo, puede ser que no se dé un aumento ya comparado con el pico de la pandemia que fue en julio, que ahí sí vivimos un número de casos bastante alto, al parecer no se daría el caso para diciembre y enero pero sí vamos a tener un aumento considerable comparando con lo que fue septiembre, abril o mayo de este año”.
Esto de acuerdo con el Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME), con sede en Washington, institución que proyecta que, para el 25 de diciembre, en Navidad, habrá al menos 3 mil 744 muertes acumuladas en Sonora y que, para el 1 de marzo de 2021, serán 4 mil 587 personas las que habrán perdido la vida.
Según los datos de la Secretaría de Salud en Sonora, el 28 de noviembre fue el día con más contagios y defunciones desde el 22 de agosto. El sábado pasado, Sonora registró 295 casos nuevos, mientras que, en aquella fecha de agosto, fueron 316. Las defunciones fueron 22, tanto el 27 de agosto como el 28 de noviembre.
“Lo que se dio fueron números similares al final de agosto”, agregó el analista, “ya venía una reducción de casos y defunciones con tendencia a la baja y digamos que estamos subiendo esa curva de nuevo; en aquel momento, cuando se compara a ayer con el 22 agosto en cuanto a casos, ese 22 de agosto era con una tendencia a la baja y, aquí, al alza: estamos subiendo la colina y, para diciembre, posiblemente se confirmen días como este, que fue totalmente atípico”.
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En cuanto a la movilidad poblacional, las estadísticas y proyecciones del IHME para Sonora muestran una tendencia a mantenerse tal y como están, con una reducción de solo entre 26 y 29% desde diciembre y hasta marzo de 2021.
Jesús Ibarra, periodista y experto en análisis de datos, explicó que octubre fue el mes con mayor movilidad en la pandemia y que esta disminuyó muy poco en noviembre.
“¿Qué se puede esperar de movilidad para diciembre, que, históricamente, dentro del calendario que tenemos de tradiciones y de festejos, es uno de los meses con mayor movilidad no solamente vehicular sino vía aérea?”, cuestionó Ibarra, “lo que podemos esperar es que la tendencia de movilidad se mantenga constante, entre niveles observados de noviembre y octubre, porque, derivado de este acuerdo que anunció la Secretaría de Salud estatal con unificar los semáforos y no elevar los niveles de alerta en función de un semáforo epidemiológico, se le permite, técnicamente, a las personas desplazarse a sus lugares de origen o a sus lugares de reunión familiar”.
El IHME establece una línea recta en la movilidad hasta el 1 de marzo.
“No es positivo ni negativo: es un factor de riesgo considerable”, aseveró, “el virus se transmite a través de cadenas de contactos, de persona a persona, o entre grupos de personas, y lo que se ha recomendado para frenar estos eventos es limitar la movilidad o los eventos con aglomeraciones”.
Ibarra reiteró que la pandemia se va a extender más allá de 2021, por lo que un aumento en la movilidad detonará las cadenas de contagio.
“¿En qué magnitud? No podemos saber”, concluyó el analista, “esperemos que se mitigue el daño -porque habrá un daño- y lo que se está haciendo es mitigar y que no sea como junio, julio y agosto, y que la capacidad de respuesta no llegue a tope, lo que está por verse. Esperemos que la gente siga las recomendaciones, pero, en vista de lo que ocurre, está otro elemento que incentiva un escenario de propagación del virus, que son las posadas, la tendencia histórica de la realización de bodas en diciembre y el descenso de temperaturas que ya estamos sintiendo”.
