Vitamina #29
La mayoría de las personas buscan su plena seguridad en 3 áreas.
1) En las personas. Si tengo un buen esposo, una esposa, ya me voy a sentir mejor, porque ella o El me abrazará cuando llegue del trabajo y será la compañía que necesito cuando este triste.
Después nos damos cuenta de que la pareja nos falla, después, nos enfocamos en los hijos, ¡¡eso es lo que necesito para sentirme satisfecho!! Cuando llegan los hijos y nos roban el tiempo y la energía que teníamos nos sentimos a veces peor que como estábamos. Después, buscamos amigos y así con el pasar del tiempo, queremos que las personas llenen nuestros vacíos y cumplan nuestras expectativas y como no es así, nos frustramos.
2) En los lugares: Si tengo una bonita casa en una privada frente a un parque “eso es lo que me va dará paz y alegría para sentirme realizado, seguro, pleno, claro que si”…Pasa el tiempo y las paredes no nos abrazan, tampoco nos dicen te amo en las mañanas y esa bonita fachada no refleja la insatisfacción de mi corazón.
3) En las cosas. Necesito tener más ahorros, más dinero, debo de trabajar más y conseguirme otro trabajo, no importa si me gusta o no, lo que vale es suplir esa necesidad que no me deja dormir seguro en la noche.
En fin…Yo también al igual que tú, he puesto mi seguridad en las cosas erróneas y termino frustrado. Pero ¿Qué pasa? Cuando nos conectamos con Dios, fuente de paz, de amor y de gozo, realmente se llena nuestra copa, simplemente porque Dios es el autor de la paz, el amor y el gozo, entonces, cuando busco mi seguridad en lo eterno e inagotable y no en lo terrenal, es cuando puedo experimentar una hermosa plenitud.
¿Cuánto más libres estemos de expectativas que se centren en la gente, en los lugares o en las cosas y cuanto más dependamos de Dios, más puro y honesto será nuestro amor hacia los demás. Eso lo dijo Gary Smalley en su libro “el amor es una decisión”
Entonces ¿Está tu vida llena de emociones negativas o llena de Dios?
No busques seguridad, mejor practiquemos un principio bíblico que se encuentra en: San Mateo 6:33 “Mas buscad primeramente el reino de Dios y justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Pasemos tiempo en comunión con Dios y bebamos su amor, su paz y su plenitud.
Yo soy Tato Balderrama y está fue la vitamina espiritual número 29.
Relacionadas
- Advertisement -
Aviso
La opinión del autor(a) en esta columna no representa la postura, ideología, pensamiento ni valores de Proyecto Puente. Nuestros colaboradores son libres de escribir lo que deseen y está abierto el derecho de réplica a cualquier aclaración.
- Advertisement -
Opinión
- Advertisement -