José Luis González Olivarría, titular de la Comisión de Búsqueda de Personas para el Estado de Sonora, deberá mostrar su lado humano para relacionarse con las familias de desaparecidos, un requisito vital del puesto.
Así lo opinó Eduardo Urbina Lucero, presidente de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de Sonora, quien dijo que aunque le satisface el currículum de González Olivarría, su reto es mostrar resultados a los familiares de desaparecidos.
“Lo que he visto de su trabajo en su currículum me satisface, me parece muy importante que le hayan dado mucho valor a la experiencia forense, que la tiene, es miembro del Colegio Forense desde hace muchos años y creo que es importante, porque más que un tema político, es un tema técnico…
Es un tema que involucra mucho cuestiones de mucha importancia jurídica y técnica en esta materia, obviamente lo que tendríamos que evaluar de él es el tema humano, porque también el tema técnico es una parte, pero el lado humano de las relaciones con estas familias, que tienen a familiares no localizados o desaparecidos, pues que sufren este tipo de eventos muy lamentables…
También hay que ver el lado humano, creo que el reto será futuro, que él demuestre que tiene este lado humano, que es vital para tratar este tema”, abundó el diputado local panista.
La Comisión de Búsqueda de Personas para el Estado de Sonora, es una área fundamental para el estado, pues con ella se institucionaliza el trabajo de los distintos colectivos de madres buscadoras, que siguen firmes en encontrar a sus desaparecidos, añadió el legislador local de Acción Nacional.
¿Quién es José Luis González Olivarría?
El doctor González Olivarría es egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); y se desempeñó como jefe del departamento de mínimos de Bienestar Social en el Instituto Nacional Indigenista en el Estado de Sonora, fue subcoordinador médico del entonces Centro de Readaptación Social de Hermosillo en 1992 y coordinador médico del Cereso de Caborca en 1993.
Fue médico adscrito al Instituto de Seguridad y Servicios de los Trabajadores del Estado de Sonora en Bahía de Kino y Puerto Peñasco; ocupó la subdirección general de Servicios Periciales de la delegación regional de la Procuraduría General de Justicia del Estado, en Caborca, zona noroeste de septiembre de 2002 a mayo de 2004; es miembro activo del Colegio Nacional de Ciencias Forenses desde 1996; perito médico de la Comisión de Arbitraje Médico e instructor de las áreas e Criminalística, en especial de preservación de la escena del crimen y medicina legal en las dos primeras generaciones de la academia de la Policía Municipal en Miguel Alemán.