El ibuprofeno es un antiinflamatorio no esteroideo ampliamente utilizado para aliviar dolor, fiebre e inflamación. En México, su fácil acceso, bajo costo y la ausencia de restricciones estrictas para su compra en farmacias han propiciado que muchas personas lo consuman sin receta médica.
Esta disponibilidad, sumada a la percepción de que se trata de un medicamento “seguro” por su recomendación frecuente entre familiares y amigos, ha normalizado su uso para dolores leves, molestias musculares, menstruales o dolor de cabeza, sin consultar a un profesional de la salud.
Sin embargo, automedicarse con ibuprofeno, es decir, utilizarlo sin indicación ni seguimiento médico, conlleva riesgos importantes. Autoridades sanitarias han advertido que su uso prolongado o inadecuado puede provocar complicaciones gastrointestinales, renales y cardiovasculares, entre otros efectos adversos.
Principales riesgos de automedicarse con ibuprofeno
- Daño gastrointestinal: Puede provocar gastritis, úlceras y sangrado estomacal, sobre todo cuando se consume en dosis altas, por periodos prolongados o en personas con antecedentes digestivos.
- Afectaciones renales: El uso indebido puede alterar la función de los riñones y derivar en insuficiencia renal, especialmente en adultos mayores, personas deshidratadas o con enfermedades crónicas.
- Riesgo cardiovascular: Su consumo puede incrementar la presión arterial y elevar el riesgo de infarto o evento cerebrovascular, principalmente en pacientes con factores de riesgo previos.
- Reacciones alérgicas: Algunas personas pueden presentar urticaria, dificultad para respirar y, en casos severos, shock anafiláctico.
- Interacciones medicamentosas: El ibuprofeno puede interferir con anticoagulantes, antihipertensivos o medicamentos para la diabetes, reduciendo su eficacia o potenciando efectos adversos.
- Ocultamiento de enfermedades: Al aliviar síntomas, puede enmascarar padecimientos más graves, retrasando su diagnóstico y tratamiento oportuno.
- Sobredosis: Exceder las dosis recomendadas puede causar dolor abdominal, vómito, confusión, somnolencia, convulsiones e incluso fallo orgánico.
¿Cuál es la dosis segura de ibuprofeno?
En adultos, la dosis diaria segura suele oscilar entre 1,200 y 1,600 miligramos, divididos en varias tomas. No se deben superar los 2,400 miligramos al día sin supervisión médica.
En niños, la dosis se calcula con base en el peso corporal, generalmente entre 5 y 10 miligramos por kilogramo cada 6 a 8 horas, sin exceder los 40 miligramos por kilogramo al día.
Especialistas recomiendan utilizar la menor dosis eficaz durante el menor tiempo posible y consultar a un médico antes de prolongar el tratamiento o aumentar la cantidad ingerida, especialmente en personas con antecedentes gastrointestinales, renales o cardiovasculares.


