El Juzgado Tercero de Distrito en Yucatán otorgó una suspensión definitiva a comunidades de la entidad contra el Tren Maya, por lo que las autoridades encargadas del proyecto deberán suspender obras en Mérida, Izamal y Chocholá.
Tras una audiencia el pasado 19 de febrero, un juez resolvió la suspensión de nuevas obras en la zona en lo que se resuelve el juicio de amparo interpuesto por habitantes de las tres zona de Yucatán, quienes reclaman falta de información durante la consulta pública de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) realizada en junio de 2020.
La decisión de suspender las obras se mantiene, luego de que el pasado 20 de enero, el colectivo Kanan, dedicado a la defensa de los derechos humanos, obtuvo una suspensión provisional en el caso.
A través de la organización, los habitantes acusan la inconstitucionalidad del tren por falta de transparencia y participación pública de la consulta.
De acuerdo con el colectivo, en la resolución que aprueba la Manifestación de Impacto Ambiental del Tren Maya, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) reconoció “la ausencia de información durante la consulta pública y que fue responsabilidad de Fonatur (el Fondo Nacional de Promoción al Turismo) el no poner a disposición de la autoridad ambiental toda la información del proyecto”.