El asesinato de George Floyd el pasado 25 de mayo en Minnesota reavivó un frente político contra la memoria histórica, la cual se abrió luego de que demócratas estadounidenses anunciaran el pasado miércoles que se retirará una estatua de mármol, ubicada en el Capitolio de California, que exhibe a Cristóbal Colón pedir financiación a la reina Isabel la Católica para su viaje a América.
En algunos sectores de Estados Unidos se relaciona la figura del navegante con los abusos a la población nativa, a pesar de que este nunca pisó el territorio norteamericano en ningunos de sus viajes.
El vecino país del norte cuenta con varias representaciones de Colón en diferentes ciudades, las cuales destacan su papel en el primer viaje trasatlántico del cual se tiene registro en la historia.
A raíz del brutal ade Floyd, y tomando en cuenta lo explicado anteriormente, varias de estas estatuas han sido objeto de actos vandálicos, por tal motivo, muchas podrían ser reubicadas.
Actualmente, el estado de Nueva Jersey es el que más figuras del marinero alberga, con 38, seguido de Nueva York con 29 y Pensilvania con 17.
Una de las más antiguas, el Columbus Obelisk de Baltimore, Maryland, la cual data de 1772, fue objeto del vandalismo en agosto de 2017, tras los disturbios racistas de Charlottesville.
Un video compartido en YouTube muestra como un individuo golpeaba la base de la estructura, mientras otra persona sostenía un cartel en que se leía la frase “derribar el racismo”.
En octubre de ese mismo año, la alcaldesa Catherine Pugh autorizó a la Comisión de Preservación Histórica y Arquitectónica de la ciudad restaurar y reubicar la estatua, expresando su interés por dedicar éste a otra figura, dada la controversia generada alrededor de Colón.
Esta manifestación dio pie a que algo similar ocurriera con otro monumento, en esta ocasión en Yonkers, Nueva York, cuando en el mismo mes de agosto, la pieza apareció sin cabeza.
El pedazo faltante fue encontrado en una bolsa de plástico en el Columbus Memorial Park, a una milla del barrio de El Bronx.
En Richmond, Virginia, el 10 de junio pasado, la estatua del marinero fue derribada, incendiada y arrojada en un lago cercano.
En un video publicado en YouTube, los mismos autores del acto declaran que lo hacían en “solidaridad con los nativos americanos”, mientras que en la base del monumento pintaron la frase “Representante del genocidio”.
El mismo día, pero en Boston, Massachusetts, otra escultura de Colón fue encontrada decapitada, y una más en el centro de Miami, Florida fue vandalizada, cubierta con pintura roja y mensajes que decían “Nuestras calles”, “Black Lives Matter” y “George Floyd”.
EN MÉXICO…
En la Ciudad de México, a dos días de que se conmemora la llegada de Cristóbal Colón al continente americano, el Gobierno capitalino optó por retirar la escultura del genovés, ubicada en una glorieta de Paseo Reforma, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Las autoridades argumentaron que esto se hizo para restaurar la pieza de “manera profunda” y para “preservar el patrimonio cultural y artístico”, de acuerdo con un comunicado difundido por la Secretaría de Gobierno de la CDMX en sus redes sociales.
A usuarios en redes sociales les pareció que esto no fue casualidad, pues este 12 de octubre, el Día de la Raza, varios colectivos habían convocado a la marcha “Lo Vamos a Derribar”, además de que desde julio pasado circula una petición en la plataforma Change.org, donde se le exige al Gobierno capitalino retirar los monumentos similares.
“Asumimos como acto soberano el derribo de monumentos execrables y como homenaje a los millones de indígenas y afrodescendientes masacrados, nuestros ancestros. Honramos su memoria y su lucha. Desmaterializamos las versiones únicas de la historia”, manifestó el movimiento.
La polémica también se generó el mismo día que Beatriz Gutiérrez Müller, esposa de Andrés Manuel López Obrador, se reunió con el Papa Francisco en el Vaticano para hacerle llegar una carta del Presidente de México, en la cual solicita a la Iglesia católica ofrecer disculpas en 2021, cuando se cumplen 500 años de La Conquista.
“Con motivo de estas efemérides, tanto la Iglesia católica, la Monarquía española y el Estado mexicano debemos ofrecer una disculpa pública a los pueblos originarios que padecieron de las más oprobiosas atrocidades para saquear sus bienes y tierras”, dice la misiva.
La estatua de Cristóbal Colón fue la primera colocada en Paseo de la Reforma, en 1877. Fue donada por Antonio Escandón, empresario y banquero mexicano, esculpida en 1873 por el francés Charles Cordier.
La misma ha sido objeto de pintas hechas como protesta por las diferentes causas por las cuales se han hecho manifestaciones que cruzan la icónica avenida de la Ciudad de México.
Con información de ABC e Infobae.