El plan de paz impulsado por la administración de Donald Trump entre Israel y Hamás se encuentra en riesgo este martes 28 de octubre, luego de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenara reiniciar bombardeos en la Franja de Gaza tras un ataque de milicianos palestinos en la ciudad de Rafah.
Los ataques aéreos y terrestres se registraron poco después del anuncio, generando una escalada inmediata de tensión en la región.
La Fuerza de Defensa de Israel (FDI) informó que la acción respondió a la detección de francotiradores y explosivos dirigidos contra sus tropas en Rafah.
Además, Netanyahu acusó a Hamás de manipular la entrega de restos de rehenes fallecidos, presentando los cuerpos como si pertenecieran a otros prisioneros, lo que enfureció a Tel Aviv y precipitó la ofensiva.
Según fuentes militares israelíes, los bombardeos buscan neutralizar ataques que podrían estar vinculados a Hamás y proteger a las fuerzas israelíes.
Sin embargo, la decisión de retomar la acción militar pone en peligro el alto al fuego firmado hace menos de un mes en Egipto y genera preocupación internacional, especialmente en Washington.
La entrega de cuerpos de rehenes sigue siendo un punto crítico: la Cruz Roja confirmó que uno de los 13 rehenes faltantes fue devuelto esta mañana, aunque derrumbes y ataques recientes dificultaron la operación. Ambos bandos se acusan de entregar restos equivocados y de demorar el proceso.
Testimonios de la agencia AP señalan que las fuerzas israelíes respondieron de manera controlada a los ataques de francotiradores, pero aún no se confirman víctimas mortales. Rafah, una de las ciudades más pobladas del sur de Gaza, es la más afectada por la ofensiva.
Fuentes de Sky News indican que Israel también podría restringir la entrada de ayuda humanitaria y focalizar sus ataques en líderes de Hamás para frenar futuras ofensivas. La comunidad internacional sigue de cerca la situación mientras el Gobierno estadounidense aún no emite pronunciamiento oficial.
Con esta medida, Netanyahu deja claro que cualquier violación al acuerdo será respondida de inmediato, y pone en entredicho la viabilidad del plan de paz de Trump en Medio Oriente, mostrando la fragilidad del alto al fuego y la persistente tensión en la región.



