La organización de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 se disculpó por las interpretaciones de una supuesta representación de ‘La última cena’.
Anne Descamps, miembro de la organización, aclaró que no se trató de una ofensa al catolicismo, luego de que la iglesia católica de Francia calificara el espectáculo como una falta de respeto a las creencias del cristianismo.
El show que causó molestias fue donde el actor francés Philippe Katerine apareció semidesnudo, con la piel de color azul, con frutas en la cabeza y flores con el fin de representar al dios griego Dionisio rodeado de bailarinas, drag queens y con la música de un DJ.
La organizadora aclaró que el propósito era hacer un paralelismo con las fiestas de los dioses del Olimpo y no con ‘La última cena’ que se describe en la biblia y que fue representada por el artista Leonardo da Vinci.
“Nunca encontrarán en mi obra ningún deseo de burlarse o denigrar a nadie. Quería una ceremonia que uniera a la gente, que reconciliara, pero también una ceremonia que afirmara nuestros valores republicanos de libertad, igualdad y fraternidad”, expresó en entrevista para el canal BFM.
Sin embargo, agregó que la ceremonia tuvo en general una buena recepción por parte del público.
Información de López Dóriga Digital