Hermosillo, Sonora.- Alicia Salazar lleva cinco años vendiendo dulces en el cruce de Reforma y Veracruz en Hermosillo; contó que ha visto la evolución de la ciudad desde las vialidades, a la par que es el sustento principal de su familia.
La señora de 54 años trabaja desde las 9:00 de la mañana hasta las 8:00 de la noche, asimismo, comentó que lo más difícil de su labor no son las horas, sino el clima “que no ayuda”, razón por la cual ha ido tomando pequeños descansos conforme avanza su edad.
Con una gorra, cubrebocas y cofia, es como Alicia se protege del inclemente sol de Hermosillo, mientras recorre los laterales de los vehículos revisando si alguien baja su ventana para hacerle una compra.
Recordó que ni siquiera la pandemia por covid-19 fue impedimento para que saliera a vender sus dulces: “Si se paraban a comprarme”, indicó.
Agregó que su vida transcurre tranquila alrededor de su familia, no obstante, sí mandó un mensaje a la ciudadanía de Hermosillo para que respeten el semáforo, ya que en sus cinco años trabajando en la colonia San Benito, ha visto muchos choques.
Por otro lado, señaló que cuando comenzó las calles estaban llenas de baches y solía haber mucho vandalismo por la zona, sin embargo, eso fue cambiando con el tiempo: “Hoy hay mucho patrullaje”.
Precisó que vende dos cajas de mazapanes en su jornada, que serían alrededor de 800 pesos al día.