Un ataque ruso con misiles este viernes a la ciudad natal del presidente Volodímir Zelenski en el centro de Ucrania mató a un agente de policía e hirió a otras 52 personas, dijeron funcionarios de emergencias, en tanto otro ataque en la región sureña de Jersón mató a tres personas.
Los ataques rusos a varias partes del país se multiplicaron durante la noche, dijeron funcionarios. Mientras tanto, Moscú trata de fortalecer políticamente su posición con elecciones locales en las zonas que ha anexado ilegalmente, incluso en algunas que no controla. El ministerio del Exterior ucraniano dijo en un comunicado que no reconoce las “elecciones falsas”.
Los ataques se produjeron días después de que otro que mató a 16 personas en un mercado en el este de Ucrania y se hallaron escombros de un dron en Rumania, lo que suscitó temores en la población local de que la guerra pudiera extenderse al país miembro de la OTAN, fronterizo con Ucrania.
El ataque a la ciudad de Kryvyi Rih, donde nació Zelenski, dañó una decena de edificios. Tres personas extraídas entre los escombros se encontraban en estado grave, dijo el ministro de Asuntos Interiores, Ihor Klymenko. Fotos publicadas por Klymenko en Telegram mostraron un edificio en llamas, maderos quemados y los servicios de emergencia evacuando a los heridos.
Tres personas murieron al caer una bomba en la aldea de Odradokamianka en la región de Jersón, dijo Klymenko.
Por otra parte, se celebró el funeral por un joven de 18 años que estaba entre los 16 asesinados el miércoles en un ataque ruso sobre un mercado en Kostiantynivka, en la región oriental de Donetsk. El incidente, en el que otras 33 personas resultaron heridas, convirtió el mercado en ruinas ennegrecidas y eclipsó la visita de dos días del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, al país para evaluar la contraofensiva iniciada por las tropas de Kiev hace tres meses y reiterar el respaldo de Washington con el anuncio de ayuda adicional por importe de mil millones de dólares.
Gran Bretaña anunció el viernes que organizará una cumbre mundial sobre seguridad alimentaria en noviembre en respuesta a la retirada de Rusia del acuerdo para exportar cereales por el Mar Negro y los ataques al suministro de grano de Ucrania.
El anuncio coincidió con la llegada del primer ministro británico Rishi Sunak a India para una cumbre del G20 donde espera reunir recursos internacionales para contrarrestar el impacto de la guerra en el suministro global de alimentos.
Información de AP