Por concluir una semana muy sensible para algunas personas, ya que incluyó el día de muertos. Y todos, ahora sí que todos, hemos pasado por momentos en que “despedimos” a un ser querido.
Me parece importante, continuar con el tema, ya que me toco acompañar a personas muy queridas en su dolor, por “la pérdida” de un familiar muy cercano.
Y más aún, no saber qué hacer con ese dolor más que ofrecerlo como ofrenda a esos seres “ausentes”.
Pero ¿Qué sabemos sobre la muerte? ¿Por qué nos despedimos? Pues porque creemos es el fin.
Desde el momento en que nacemos está dentro de nuestro ciclo, el morir. Sabemos que va a llegar; a unos les llegará recién nacidos, a otros a los 20 años, a los 50, a los 100; pero llegará.
Y esto tiene mucho que ver con la educación que recibimos al respecto, porque la consideramos como el “fin de la existencia”
La Doctora Lucía Cordero, en una conferencia del día de muertos mencionó que ha llegado el momento de dejar de creer que somos solo materia y que hay que estudiar a la energía, al cuantium, a la vibración.
Afirmaciones fuertes, pero que cada día que pasa, somos más conscientes que es una realidad, que no somos solo materia. hoy desde la Psicología Transpersonal, desde la misma ciencia, vemos mucho más allá de lo que creíamos.
Utilizó la frase de Lavoisier (padre de la química moderna) donde “La energía no se crea ni se destruye, solo se transforma”.
Lo que quiere decir: si nos miramos de origen como energía, al dejar la materia no nos destruimos, solo nos transformaremos.
Así que ¿Cual fin? nos dice qué siempre hemos estado, estamos y siempre estaremos.
Que lo único que existe en realidad es la vida; y la vida tiene su polaridad como todas las cosas que existen en el universo.
En nuestra visión materialista se concibe una separación y una fragmentación; en donde el cuerpo es materia y la energía y el espíritu están separados de la materia.
Una visión fragmentada que tenemos de la vida, pero porque nosotros hemos decidido vivirla así. Nos separamos en órganos, sistemas, de tal manera que estudiamos por separado el cuerpo y nos vamos fragmentando y reduciendo a la mínima expresión de todo lo que somos.
El origen de la vida de acuerdo a esta concepción es que en el universo ya está tu información, la mía y la de todos. Que siempre ha estado y siempre estará.
Por lo tanto, siempre hemos existido y lo que llamamos muerte, no es muerte, es continuación.
Y desde esta visión holística todo tiene que ver con todo. nuestro sistema de creencias, pensamientos, emociones todo, va a impactar la materia.
Y preguntaba la doctora que tenemos que hacer cada uno de nosotros: prepararnos, conocernos, aceptarnos, vivir realmente con una visión integral; como un todo y como parte de todo.
Por lo que, la muerte como tal no existe, hay una continuación, solo estamos a veces en reposo y otras veces en actividad.
En esta dualidad que vivimos, en una inhalación-exhalación constante. Dice llegado el momento, solo hay que disponernos a dormir un ratito más largo.
Que nos sirva esto pues, para abrirnos un poco más a nuestra verdadera realidad.