9 de agosto se conmemora, el Día Internacional de las Poblaciones Indígenas, esta fecha nos permite recordar, la importancia de estas maravillosas comunidades que siempre están al pendiente del cuidado y de salvaguardar la naturaleza, siendo los mejores guardianes de nuestra madre tierra.
Los pueblos indígenas han heredado y practicado culturas y formas únicas de relacionarse con la gente y el medio ambiente, además son grandes conocedores de su entorno y como este se relaciona con uno mismo.
En estas comunidades las mujeres ayudan a preservar la larga historia de interacción de estos pueblos con el medio natural, abarcan un complejo cultural que va desde el lenguaje, los sistemas de clasificación y nombres o las prácticas de uso de recursos, los sistemas alimentarios, rituales, la espiritualidad y las visiones del mundo.
Sin embargo, muchas de las comunidades originarias, poseedoras de los bosques y selvas, viven en condiciones de pobreza y marginación. Adicional a eso, sufren de grandes agresiones cada año por defender esos bienes naturales donde ellos viven.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas, existen alrededor de 476 millones de indígenas viviendo a lo largo de 90 países. Representan poco más del 5% de la población mundial, sin embargo, se encuentran entre las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables representando el 15 por ciento de los más pobres.
En México, según datos del censo de INEGI, en el país residen 7 364 645 personas que hablan alguna lengua indígena, en comparación con 2010, el número de hablantes de lengua indígena se incrementó en 451 mil personas. Sin embargo, en términos porcentuales, las personas que hablan lengua indígena disminuyeron de 6.6 a 6.1 por ciento.
En Sonora, los Pueblos indígenas con mayor presencia en la entidad son 7, entre los que destacan: Cucapás, Guiarijíos, Mayos, Yaquis, Pápagos, Pimas y Seris. En esta ocasión me gustaría platicarles un poco del primer pueblo indígena que arribó al noroeste de Sonora hace más de 6 mil años.
Los Cucupás, han habitado en el municipio de Mexicali, Baja California, y en Pozas de Arvizu y la cabecera municipal de San Luis Río Colorado en el estado de Sonora; mientras que sus parientes cocopah viven sobre todo en Somerton, Arizona, en Estados Unidos.
La etnia es binacional con una población de poco más de 171, de los cuales sólo 47 hablan su lengua. Son una etnia emparentada lingüísticamente con los grupos pai pai, kiliwa y kumiai, habitantes de Baja California, y con los javasupai, hualapai, yavapai, mojave y maricopa, de Estados Unidos. En conjunto conforman la familia yumana, que arribó al noroeste de Sonora y norte de la península de Baja California.
Dentro de su cultura, poseen una creencia animista: adoran al sol, el mar, el río. El escarabajo también tiene un papel importante, porque es quién vigila la entrada al más allá y decide el destino de las almas. Su dieta estaba integrada por especies acuáticas obtenidas del mar, la laguna Cahuilla y el río Colorado, así como productos obtenidos mediante la caza, la recolección y la agricultura. Los cantos del kuri kuri son parte de su tradición musical. Cuando los interpretan evocan a los animales del desierto y de la sierra. La medicina tradicional se practica principalmente en el ámbito doméstico. Pocas personas poseen el conocimiento de la medicina tradicional con la que curan, por medio de plantas medicinales.
¿Y tú ya conocías a los Cucupás?
Lic. Pamela Ibarra Dávila
Presidenta de Cultura Verde Amor por el Planeta A.C