Hermosillo, Sonora.- “Desde el amor, no hay nada qué curar” y “Juntos por la paz” son algunas de sus consignas que gritaron miles asistentes de la marcha del Orgullo LGBT+ 2022 en Hermosillo.
La caravana de vehículos decorados con los colores de la bandera gay inició a partir de las 5:00 pm en la gasolinera El Faro sobre los bulevares Ignacio Soto y Kino, para culminar en las escalinatas del Museo de la Universidad de Sonora.
Manifestantes llegaban con pelucas coloridas y maquillajes dramáticos, algunos en compañía de menores, familias, amistades y parejas, con pancartas en apoyo a la comunidad LGBT+.
La música generó un ambiente ameno entre los manifestantes quienes gritaban, cantaban, bailaban y proclamaban su amor en la vía pública.
A las 7:00 pm, cuando los asistentes llegaron a las escalinatas del museo, comenzó el evento artístico programado para amenizar la fiesta del orgullo; los conductores externaron que la celebración fue para tomar las calles y “todes” sean vistos.
Erika Salinas, activista social y altruista, tomó el micrófono para dar testimonio de su vida y los rechazos que sufrió por su orientación sexual.
“Yo solo estaba enamorada y quería ser feliz”, expresó.
Además, denunció el “Ecosig”, una práctica que consiste en el esfuerzo para corregir la orientación sexual y la identidad de género de una persona, también llamado terapia de conversión.
En entrevista para Proyecto Puente, el organizador de las manifestaciones del orgullo en Hermosillo desde hace diez años, Adriane Arenas, informó que en esta ocasión el aforo superó los 12 mil asistentes, en comparación a la primera marcha en 2012 donde estuvieron solo 300 personas, y en 2021 hubo 5 mil participantes.
El mensaje de Arenas es que la comunidad LGBT+ no tienen nada que curar, y solicita de favor a la sociedad que curen su homofobia, lesbofobia y bifobia, ya que eso les hace daño, expresó.