El Congreso de España aprobó la ley de la eutanasia, que reconoce el derecho de una persona a solicitar ayuda para poner fin a su vida.
La norma establece que esta práctica se podrá llevar a cabo en el país para pacientes que lo soliciten y que se encuentren en un contexto de “padecimiento grave, crónico e imposibilitante o enfermedad grave e incurable, causantes de un sufrimiento intolerable”.
Según la norma, el paciente deberá tener nacionalidad española o residencia legal o certificado de empadronamiento que acredite un tiempo de permanencia en territorio español superior a 12 meses.
La legislación establece que el paciente deberá ser mayor de edad y “ser capaz y consciente en el momento de la solicitud”.
Si el paciente está consciente, debe solicitar la eutanasia dos veces por escrito (o por otro medio que deje constancia si no puede escribir) en dos documentos separados por 15 días, haciendo patente que no es “resultado de ninguna presión externa”.
El proceso exige supervisión, información, certificación y asistencia médica.
Un experto deberá recopilar la opinión de otro médico consultor, según la legislación que entrará en vigor en abril del año próximo.
De acuerdo con el diario El Mundo, el proyecto aprobado ayer, fue presentado por primera vez en 2017 por el partido Unidas Podemos y, posteriormente, en mayo de 2018, por el Socialista Obrero Español.
La eutanasia, cuando un médico aplica fármacos letales a un paciente, es legal en Bélgica, Canadá, Colombia, Luxemburgo, Países Bajos y Suiza.
En algunos estados de Estados Unidos se permite el suicidio asistido médicamente, en el que los pacientes se administran el fármaco letal ellos mismos, bajo supervisión médica.
Un pequeño grupo de personas se reunió frente a la sede del Parlamento en Madrid ondeando banderas negras con calaveras para protestar contra el proyecto.
Actualmente, la eutanasia está penalizada con 10 años de cárcel.
“Es un día importante para toda la ciudadanía porque avanzamos hacia una sociedad más humana y más justa, pero sobre todo es un día importante para aquellas personas que se encuentran en una situación de grave padecimiento y tambien lo es para sus familias y personas cercanas”, expresó el ministro de Sanidad, Salvador Illa.
La norma pasará al Senado, donde no enfrenta dificultades para su aprobación.
LOS DATOS:
- El proyecto prevé que una persona que sufre de un enfermedad grave, que incapacite o que sea incurable, pueda recibir ayuda para terminar con su vida si así lo solicita, para evitar un sufrimiento intolerable.
- La demanda debe ser hecha por escrito y repetida quince días más tarde.
- Dos médicos deberán dar su aprobación sucesivamente, y luego será examinada por una comisión.
- Los profesionales que no deseen participar podrán declarar objección de conciencia.
Información tomada de www.excelsior.com.mx
